Números inmaculados

Y es que después de los últimos artículos que escribí el año pasado, en el que se basaron casi todos ellos en un 90% en la situación burocrática de la entidad por la vergonzante temporada deportiva realizada en el verde, hoy quiero comentar y opinar, siempre bajo mi punto de vista, sobre la polémica suscitada tras el juego del equipo en la victoria por 0-2 del pasado domingo en Lebrija.

Observo ciertas críticas al juego del equipo y por ende al entrenador como el principal responsable del juego de éste. Se está cuestionando el juego realizado hasta el momento y algunas opiniones aseguran que no se está jugando bien, que en determinados partidos se ha ganado por la pegada/calidad de los jugadores de la plantilla. Pero yo me hago una pregunta y no sé si alguien que se entretenga en leer este artículo, podrá responder a la misma: ¿Qué es jugar bien? Los que bien me conocen, saben que yo todos lo años, le doy de margen a las diferentes plantillas 10-12 partidos para poder evaluar su rendimiento a corto, medio y largo plazo, a excepción del año pasado, que por las características de la competición casi no existía margen de error. Todavía para llegar a esa cifra de encuentros que he citado estamos a medio camino y ya asoman las primeras críticas sobre el juego desplegado. Algo pronto aún, teniendo en cuenta que es una plantilla y un cuerpo técnico nuevo y para ver esa conjunción y cohesión todavía falta tiempo.

Pero mi sorpresa llega, ya no sólo por el momento inicial de campeonato en el que nos encontramos, sino porque las críticas en este momento, creo que son injustas y desproporcionadas. Miren ustedes, el fútbol, o al menos así lo veo yo, es presente, son resultados y sobre todos son números. Estos últimos son objetivos y no engañan a nadie. Y dichos números hasta ahora y esto quiero subrayarlo, hasta ahora, son INMACULADOS: cinco partidos disputados (con tres salidas de las más complicadas ya realizadas, como son las de Utrera, Lucena y Lebrija); cuatro victorias, un empate, 10 goles a favor y dos en contra, sumando 13 puntos de 15 posibles. Esta es la realidad señores y son los números hasta ahora como bien he destacado antes. En fútbol lo demás no vale. Si se gana jugando mal, nadie se acordará finalmente como se llevó a cabo esa victoria. Sólo se recordará y servirá los 3 puntos que hubo en juego. Porque insisto, lo único que vale, son los resultados. Como algunos dicen: “jugar bien, es ganar…”

Vuelvo a hacer hincapié en que esto es a día de hoy. Si el equipo se saliera de esta trayectoria, ya tendremos tiempo de criticar lo que haga falta, el primero yo, porque como vengo manifestando a mis allegados, no quedar primeros de grupo sería para mí un autentico fracaso. Yo lo que quiero es ganar, ganar, ganar y ganar. Me da igual como se gane, como se llegue a ello, pero que me saquen al equipo de esta categoría en marzo mejor que en abril y en abril mejor que en mayo. Ahora lo que hay que hacer es recuperar cuanto antes las categorías perdidas en el año de la vergüenza y ya tendremos tiempo para exigir algo más que sólo ganar.

Manuel Obel