un viaje por la provincia
Ruta por los castañares de la Sierra de Huelva: piérdete por los pueblos con más encanto de la provincia
carreteras secundarias
De Los Marines a Hinojales existen auténticos corredores que penetran en el corazón del Parque Natural de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche
De Los Marines a Cortelazor y de Cortelazor a Hinojales los viajeros podrán sumergirse en el entorno natural y cultural de esta región única. Estos trayectos rurales serpentean entre montañas, dehesas y pequeños pueblos que conservan su esencia más auténtica, convirtiéndose en una experiencia inolvidable para quienes buscan descubrir la riqueza de la Sierra onubense.
El recorrido comienza en Los Marines, un pintoresco pueblo de calles empedradas y casas encaladas que destaca por su tradición agrícola y paisajes rurales. Su iglesia, Nuestra Señora de los Remedios, es un ejemplo de la arquitectura sencilla y acogedora de la zona, mientras que su romería homónima da muestra del fervor y las tradiciones de sus habitantes.
Características de la Carretera
-
Distancia: aproximadamente 5 kilómetros.
-
Tiempo estimado: unos 10-15 minutos en coche.
-
Tipo de vía: carretera secundaria, estrecha y con algunas curvas, ideal para una conducción tranquila. La carretera HU-8122 conecta los pueblos de Los Marines y Cortelazor, cruzando un paisaje característico de la sierra. Es una vía tranquila que permite disfrutar del entorno, natural y hacer paradas en puntos panorámicos.
Desde aquí parten varias rutas de senderismo que conectan con localidades vecinas o exploran el entorno natural, como la ruta hacia Aracena, ideal para disfrutar de un paseo relajado entre bosques de encinas y alcornoques, o la ruta de los Molinos de Los Marines, que transita por antiguos molinos y arroyos, perfecta para familias.
Para los más aventureros, la ruta hacia Alájar, pasando por la Peña de Arias Montano, ofrece una experiencia más exigente, pero con recompensas visuales excepcionales. Cada kilómetro ofrece un nuevo motivo para detenerse, ya sea para admirar paisajes espectaculares, disfrutar de la rica gastronomía local o explorar a pie rutas de senderismo que revelan los secretos mejor guardados de esta región.
Los Marines: Tierra de 'lagaretas'
Como punto de partida para la ruta por la carretera HU-8122, que conecta Los Marines con Cortelazor, es obligatorio hacer una parada en Los Marines. A seis kilómetros de Aracena, por la N-433, se encuentra esta población, con un casco urbano arropado por un bosque de castaños. En el centro del pueblo, la parroquia de Nuestra Señora de Gracia se presenta como un templo donde se conservan en buen estado el retablo mayor, de estilo barroco florido, muy recargado, en el que se encuentra la imagen de la patrona y titular de la iglesia. También se puede apreciar la obra anónima del siglo XVI, así como el estandarte de la Divina Pastora, con pintura del higuereño Alonso Miguel de Tovar, pintor de cámara de Felipe V y discípulo de Murillo.
Tanto el casco urbano como la iglesia están catalogados como Bienes de Interés Cultural. Aprovechando el paso por Los Marines es imprescindible hacer un parón en la ruta para conocer las 'lagaretas', que son pequeños lagares o casas de viña construidos en los corrales de las viviendas, donde a comienzos del otoño, después de la vendimia, se produce el mosto. No podrás irte sin probarlo, es algo que sirven en los bares de la localidad.
Cortelazor, el 'pueblo museo' de la Sierra de Aracena
Al llegar a Cortelazor, el viajero se encuentra con un encantador 'pueblo museo' cuyas calles están decoradas con arte y cerámica, una expresión genuina del talento local que otorga a la localidad un carácter único y acogedor.
Este pequeño rincón de la Sierra de Aracena destaca por su tranquilidad y por sus tesoros históricos, como la iglesia de San Pedro, un templo de estilo mudéjar construido en el siglo XVIII, y sus castañares centenarios, que cobran un encanto especial en otoño.
Además de su belleza arquitectónica y natural, Cortelazor es un punto de partida perfecto para explorar la sierra a pie. Entre las rutas más recomendadas se encuentra la que conduce al pintoresco pueblo de Alájar, un camino que transcurre por paisajes de dehesas, bosques y montañas.
Otra opción es la ruta circular que conecta con Los Marines, ideal para disfrutar de un recorrido moderado entre paisajes que reflejan la biodiversidad y la serenidad de la comarca.
No menos destacada es la ruta de los Molinos de Cortelazor, un paseo accesible que permite descubrir antiguos molinos de agua en un entorno rural que combina historia y naturaleza. Este itinerario, lleno de encanto, invita al visitante a sumergirse en la esencia de la sierra y a disfrutar de la tranquilidad y belleza que envuelven a Cortelazor, convirtiéndolo en un destino imprescindible para quienes buscan desconexión, cultura y paisajes inolvidables.
Un paisaje entre castañares hasta Hinojales
Continuando este recorrido por la carretera HU-9107, que conecta Cortelazor con Hinojales, el visitante se encamina hacia uno de los pueblos más tranquilos y auténticos de la sierra. Con apenas 200 habitantes, Hinojales conserva una atmósfera rural que parece detenida en el tiempo.
Su iglesia de San Sebastián, con elementos mudéjares, es un punto destacado, mientras que las actividades ganaderas y la cría de cerdos ibéricos muestran el fuerte vínculo de la localidad con su entorno natural.
Desde Hinojales, diversas rutas de senderismo invitan a explorar los alrededores, como la ruta hacia Castaño del Robledo, que atraviesa hermosos castañares, o la ruta circular que conecta con Galaroza, que presenta vistas espectaculares de la sierra y una experiencia más completa para senderistas experimentados.
Esta pequeña localidad, situada en el valle del río Múrtigas, además de ser la huerta de la Sierra, por la abundancia de árboles frutales, muestra un bello casco urbano que ha cobrado protagonismo con la manufacturación castañera. De hecho, en su término municipal se encuentra una cooperativa que exporta el producto por toda Europa, Brasil y Estados Unidos.
También destacan la ruta hacia La Nava, un pequeño enclave rodeado de tranquilidad, y la ruta del Castillo de Cumbres Mayores, que combina historia y naturaleza en un trayecto lleno de belleza.
Los amantes del senderismo podrán descubrir en este trayecto un tránsito perfecto para esta época del año, que es recorrer el castañar de la Sierra de Aracena. En la provincia de Huelva se ha creado una cultura que gira en torno al castaño y que se sigue conservando en muchos pueblos de la provincia con fiestas, tradiciones y oficios ligados a la temporada de la castaña.
Experimentar este paisaje es único, tanto por la riqueza cromática que presenta el entorno natural como por la belleza de los pueblos de alrededor. Los recorridos se desarrollan por los municipios con más superficie de castaños, donde además de los atractivos naturales, el visitante podrá disfrutar de la arquitectura serrana, los monumentos y la exquisita gastronomía de la zona.
Pueblos como Aracena, Los Marines, Fuenteheridos, Castaño del Robledo o Galaroza están directamente vinculados desde el siglo XIII con el cultivo del castaño. Entorno a este tipo de árbol y a su fruto, con los años, se ha creado una cultura que en la actualidad se sigue conservando en estos lugares con fiestas, tradiciones y oficios ligados a la temporada de la castaña.
Ambas rutas, la HU-8122 y la HU-9107, ofrecen oportunidades para disfrutar de la observación de fauna y flora, como aves rapaces y mamíferos pequeños, además de paisajes ideales para la fotografía, especialmente en otoño, cuando los bosques de castaños y robles se tiñen de tonos ocres y dorados.
Los pueblos que se encuentran a lo largo de estas carreteras también destacan por su rica gastronomía, con productos locales como jamones y embutidos ibéricos que pueden degustarse en sus pequeñas tabernas y mercados.
Para aprovechar al máximo el recorrido, se recomienda conducir con precaución debido a las curvas cerradas y planificar paradas en puntos panorámicos estratégicos. Conducir despacio no solo es esencial debido a las curvas cerradas de estas vías, sino también para disfrutar del paisaje y realizar altos en puntos panorámicos estratégicos.
Dónde dormir
-
La Casita de Platero: (Finca Buenvino, CN 433, km 95, Los Marines)
-
Posada Matadero: (Calle Nueva, número 9, Cortelazor)
-
Casa Rural Camino del Castaño: (Camino de la Confesa, S/N Galaroza)
Además, llevar un mapa detallado o un GPS es fundamental, ya que algunas rutas pueden ser confusas. Planificar paradas en los pueblos y reservar tiempo para explorar sus atractivos y disfrutar de su gastronomía es otra clave para que el viaje sea una experiencia completa.
La primavera y el otoño son las mejores estaciones para recorrer estas vías, ya que el clima es suave y el paisaje alcanza su máximo esplendor. En los pueblos que jalonan estas carreteras, como Los Marines, Cortelazor e Hinojales, abundan pequeñas tabernas y restaurantes donde se puede degustar lo mejor de la cocina serrana. Entre los platos más populares se encuentran el guiso de castañas, el revuelto de setas y el potaje de garbanzos con tagarninas, cada uno de ellos preparado con ingredientes frescos y locales.
Dónde comer
-
Bar Brioso: (Calle Nueva, 10, Hinojales)
-
Mesón los Madroños: (Ctra Cortelazor- Los Marines Km. 1, Cortelazor)
-
Taberna Bretones: (C. Andalucia, 27, 21208 Los Marines, Huelva)
Estas carreteras son mucho más que simples caminos; son una ventana al corazón de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, donde naturaleza, historia y cultura se entrelazan para ofrecer al visitante una experiencia inolvidable. Atravesar estas rutas es adentrarse en un mundo donde el tiempo parece detenerse, un lugar donde cada pueblo y cada sendero cuentan una historia y revelan una faceta única de esta región de Andalucía. Desde los castañares centenarios hasta las pequeñas localidades llenas de encanto, este recorrido es una invitación a descubrir la esencia de Huelva y a vivir momentos que quedarán grabados en la memoria.