EXPOSICIÓN DE VÍCTOR PULIDO EN CAJA RURAL
El amor soñado
Cuenta Ibn Hazm (1) en las páginas de uno de los más hermosos tratados sobre el amor de la literatura universal, cómo su amigo Abú al Sarí ‘Ammár ibn Ziyád, maula o liberto de Hissan II, le había contado que se había enamorado en sueños y los irresolubles problemas que ello le había acarreado, ya que como nos cuenta que le narró su desconsolado amigo al autor arabigoandalusí: “al despertar, noté que mi corazón se había ido en pos suyo, y que me había enamorado perdidamente de ella. Por culpa de su amor me veo en este penoso estado”.
Reflexiona hace más de mil años el filósofo y poeta onubense (2), diríase que anticipándose a la más moderna psicología: “Es este un caso de sugestión anímica o de pesadilla, que entra dentro del campo de los deseos reprimidos y de la fantasía del pensamiento”. Aquí y no en otro lugar debe enmarcarse la última propuesta del artista Víctor Pulido, donde en un maremágnum pleno de hermosura reúne buena parte de su última obra, desde dibujos hasta pequeñas esculturas, pero sobre todo su obra en gran formato donde la resina se hace explosión de color.
Hace poco entrábamos en su estudio y veíamos el ingente trabajo que está llevando a cabo para conformar estos sueños perseguidos con esmero que nos recuerdan a ese otro inmenso poeta español, San Juan de la Cruz: “Tras de un amoroso lance, / y no de esperanza falto, / subí tan alto tan alto, / que le di a la caza alcance”. (3)
Mas incapaz de renunciar a todo ese amor que a cubadas riega sobre sus cuadros, Pulido pugna por mostrarnos todo ese amor en una luminosidad estricta, medida, de un poderoso ritmo cromático y una fuerza compositiva que trasciende de lo figurativo para abrirse a la más pura abstracción.
Vuelvo a Ibn Hazm para rematar con unos versos (4) suyos la faena pulidiana: “Querría saber quién era y cómo vino de noche / ¿Era la faz del sol o era la Luna? / ¿Era una idea que la razón alumbró en sus reflexiones? / ¿Era una imagen espiritual que hizo surgir ante mí el pensamiento? / ¿Era un espectro forjado con las esperanzas del alma / y que la vista tuvo la ilusión de alcanzar?”.
O quizás sea solo la inevitable búsqueda de la belleza, el deseo de conquistar la belleza lo que mueve a Víctor Pulido a construir este meditado trabajo, este arte en el que encuentra el corazón. Kierkegaard en su trasunto autobiográfico (5), pone en boca de Johannes, el protagonista que intenta y logra el amor de Cordelia, una frase que hemos visto en la sonrisa del artista, en su satisfacción por el trabajo bien hecho: “me alimento de la poesía, es mi única comida”. Víctor Pulido se alimenta de la obra bien hecha, de la inmensa satisfacción que produce la creación artística.
El amor soñado, ese intento de alcanzar lo que en el fondo de nuestros corazones sabemos que guardamos. De todo ello el espectador podrá dar buena cuenta estos días en la sala que la Caja Rural tiene en la calle Botica y al mismo tiempo en la madrileña sala Clorofila Digital.
1. El collar de la paloma. Tercer capítulo, intitulado Sobre quien se enamora en sueños.
2. Ibn Hazm de Córdoba, y lo hemos dicho muchas veces, regresa en su madurez, despreciado cuando no perseguido por todos, a la tierra llana de Huelva de la que su familia, recién convertida al Islam partió dos generaciones antes en busca de fortuna a la capital del Califato para vivir, cosas del destino, los momentos más trágicos y convulsos de estas brillantes páginas de la historia de España, la desintegración del Califato, la formación de taifas y al fin la invasión de los integristas almorávides. En Mon Lisám, probablemente en la tierra llana que se abre desde el actual San Juan del Puerto hacia poniente, regada por emisarios del río Tinto como el arroyo La Habana y la ribera de la Anicoba o Nicoba, vino a acabar sus días, pero también a completar su inmensa obra, cada vez más conocida y reconocida, rodeado de su familia y de un reducido grupo de discípulos, quien fuera el filósofo, teólogo y panegirista omeya más crítico con el desmembrado poder de los reyezuelos que siguieron a la crisis califal, pero sobre todo a uno de los más excelsos poetas españoles.
3. Cántico espiritual. Coplas a lo divino.
4. Continúo utilizando la traducción que don Emilio García Gómez hiciera de El collar de la paloma y que ha sido reeditada en multitud de ocasiones por Alianza Editorial en sus contundentes colecciones El libro de bolsillo y Literatura.
5. En Diario de un seductor el joven Soren Kierkegaard describe realmente su proceso de seducción y la relación que mantuvo con Regina Olsen, con la que acabaría rompiendo el filósofo danés.
6. Hasta el 28 de mayo en la sala de exposiciones del Centro Cultural José Luis García Palacios, calle Botica. Fundación Caja Rural del Sur.
7. El mantenerme alejado, en un obligado pero cómodo exilio interior, de los aconteceres onubenses, hizo que no supiera hasta hace bien poco que la sala de la calle Botica y su centro cultural han recibido el nombre de José Luis García Palacios, quien fuera presidente de la Caja Rural y hombre estimado y admirado por quienes tuvimos la oportunidad de haber al menos charlado alguna vez con él. Su nombre en la galería y salón de actos, pero sobre todo su recuerdo, lo tendremos siempre presente.