SARA SERRAT
'Pensamientos confinados' (XLVI): La salud es lo primero
Indignación. Ese es el sentimiento que me recorre por dentro. Eso es lo que siento al ver alguien que parece que esta historia no va con él, ni con su familia, ni con sus amigos, ni con sus vecinos. Al ver que, para muchos, tan solo son números. Una cifra que va creciendo pero que, da igual, la cosa no va con ellos.
Tristemente esas cifras son vidas, personas a las que el virus les ha vencido y se ha apoderado de ellos arrebatándole su existencia. Pero para muchos españoles sólo han sido días que han tenido privada su libertad de poder salir a la calle. Porque se ha abierto la veda de los paseos, de la actividad física y deporte y les ha faltado el tiempo para desobedecer las horas a las que corresponde salir, no guardar la distancia de seguridad, abarrotar parques, paseos y vías, salir sin mascarillas, quedar con amigos en la calle incluso en casas o saltarte el kilómetro que está permitido, porque da igual, uno más o uno menos, nadie me va a parar.
Empatía. Eso es lo que en este mundo falta. Ponernos en el lugar del otro. Pero claro, como el COVID-19 no te ha cogido de cerca porque eso solo sale en la tele... ¿para qué voy a llevar a cabo todas las medidas de seguridad que recomiendan?
Ponte en el lugar del otro, de todas esas personas que han perdido a un ser querido, de todos esos sanitarios que han expuesto su vida para curar a todos los enfermos, de todas esas personas que te han seguido abasteciendo para que no te faltara ninguna comida que llevarte a la boca, de aquellas personas que han estado desinfectando diariamente las calles, supermercados, edificios... todos tenemos ganas de que esto vuelva a la normalidad, pero a este paso estamos involucionando, volviendo atrás.
A mí también me apetece poder jugar al fútbol con normalidad, poder quedar con mis amigos, poder ir a Huelva a abrazar a mis padres y mi hermana, ver a mi abuela y a mis tíos. También me apetece sentarme a tomarme mi tapita de caracoles mientras la brisa de mi Huelva me siente bien cerca o quedarme las horas muertas en cualquier playa mientras siento que estoy en casa.
A todos nos apetece que esto sea tan solo un mal sueño, pero por desgracia ahora mismo es una realidad. Por eso, protégete, empatiza y se consciente. Ya vendrán tiempos mejores, pero para eso tienes que poner de tu parte.
Sara Serrat Reyes,
Graduada en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte
Doctoranda en la Universidad de Huelva
Futbolista Profesional
(Confinada en Dos Hermanas, Sevilla)
