El runrún: Carolina y su «amiga de toda la vida» desde París

huelva24

15/11/2024 a las 19:56h.

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Estremece dar el salto mental al día en el que Carolina Marín se lesionó en los Juegos Olímpicos de París. Con su rodilla se partía también su sueño de volver colgarse una medalla, pero sobre todo se quebraba el corazón de todos los que la quieren y saben que no había nadie en el mundo que hubiera luchado más para aspirar a estar entre las mejores nuevamente tras recomenzar de cero por dos lesiones anteriores graves. Ese día y el siguiente había dolor, incredulidad, pena, mucha solidaridad y cariño hacia Carolina, muchas ganas de demostrarle que lo que había en ella vale más que cualquier medalla de oro y que ese es y será su legado, el motivo de orgullo de toda Huelva y el resto de España que ha vivido con ella infinidad de triunfos y que en su pérdida más dura la sienten aún más cerca. En esos días oscuros fue una luz brillante el gesto de He Bin Jiao, la jugadora china a la que iba ganando cuando se lesionó en aquella semifinal y que finalmente se colgó la medalla de bronce y quiso acordarse de Carolina subiendo al podio con un pin de España.

Tras aquel fatídico 6 de agosto ambas volantistas se han reencontrado gracias a nuestros compañeros de Relevo, también del grupo Vocento. Las dos estaban invitadas al evento 'Relevo X Change' y todos los detalles de lo que hablaron está en una noticia que firma José M. Amorós. En ella Carolina reconoce que «tenía muchas ganas de verte« y que «desde el momento en el que subiste al podio y llevaste el pin de España, fue un gesto que no me lo esperaba. Tenía muchas ganas de verte y poder agradecértelo en persona».

La jugadora china estaba en España para recibir un reconocimiento en los 'Relevo X Change', evento creado por Relevo para premiar a aquellos

deportistas que construyen una sociedad mejor a través del deporte. Pero claro, quería ver a Carolina. Reconoció estar «súper emocionada por volverse a ver y además, poder hacerlo en España«. Recordó «de su gesto que «ella había apagado su teléfono, no quería hablar con nadie y pensé que, mostrando este detalle, ella podría verlo y entender qué quería decirle».

«Nunca nadie me había hecho algo así y te estaré siempre agradecida», cuenta la onubense, mientras que su compañera confiesa que «al estar hablando así, de esta manera tan cercana, me siento súper conectada. Es como si estuviéramos entrelazadas, como si fuéramos amigas de toda la vida». Marín opina lo mismo y afirma que «con ella siento como un cariño especial y sobre todo yo creo que también empatizamos mucho y conectamos muy bien«.

Y así es como de un momento trágico y triste surge una relación estrecha y con visos de ser duradera entre dos grandes como deportistas pero aún más como personas.

Avisamos ya que no vamos a meternos en la casa de la onubense Laura Sánchez. Que no sabemos ni cómo es el dormitorio ni el salón ni los baños ni nada de nada. Bueno sí. Sabemos que tiene un suelo precioso y que la mudanza no ha sido un martirio para ella. Para la mayoría de los que se mudan puede llegar a ser un tormento. Primero el esfuerzo físico y luego que siempre hay algo que se rompe y algo que se pierde.

Parece ser que la modelo y empresaria de Huelva no ha tenido ese problema y no ha experimentado eso de que «las mudanzas son una de las mayores causas de estrés». Ella ha conseguido hacer una mudanza express, pero claro ha tenido una ayuda profesional inmejorable y que la ha dejado tan satisfecha que ha dicho aquello de «ayyy si os hubiera conocido antes».

Y de todo lo que implica una nueva casa, un nuevo hogar, una nueva etapa de la vida, tras su separación, pues tampoco vamos a decir nada. Ya lo dice ella: «Gracias a todos los que habéis tratado «mi vida» con tanto cariño… y los cambios son para bien… felicidad absoluta!!!», afirma. Nada más que decir.

A falta de incidentes de gravedad ocasionados por el temporal que ha azotado la provincia durante los últimos dos días, en muchas familias la mayor fuente de tensión se encontraba en el grupo de Whatsapp del colegio. En ellos, madres en su inmensa mayoría buscaban información para decidir si mandaban a sus hijos a clase al día siguiente. Con la previsible desactivación del aviso naranja a media tarde del jueves todo parecía haberse aclarado y la decisión era que los centros educativos reabrirían con normalidad el viernes. Pero algo no cuadraba: si se decretó el cierre de los colegios por este aviso y éste seguía vigente, ¿porqué en este caso sí se daba luz verde al regreso a las aulas? Con esta duda aunque con la certeza de saber que la actividad docente se retomaría, los onubenses nos fuimos a la cama. No sospechábamos que la Junta de Andalucía nos tenía reservado un comunicado sorpresa que no hizo público hasta pasada la una de la madrugada. En él anunciaba que, como aconsejaba la lógica desde hacía varias horas, las clases se suspendían también el viernes. Por supuesto, el desconcierto fue mayúsculo desde primera hora de la mañana y más de uno se presentó en el colegio sin conocer el cambio de planes decretado por la Junta con nocturnidad y, si no con alevosía, sí con muchísima torpeza.

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