El utillero del Recreativo se marcha dolido con los rectores tras su despido: «Este escudo no es más que un instrumento al servicio de sus intereses particulares»

El Recreativo de Huelva ha despedido recientemente a Antonio Zarria, que llevaba 19 de los 42 años que tiene trabajando en el club, primero como recogepelotas y ayudante de los carismáticos hermanos Perico y Cheche Toscano, y después como utillero en las últimas temporadas.

«Han sido unos días muy duros pero también de recibir muchas llamadas y mensajes de apoyo. No quería dejar pasar la oportunidad de daros las gracias a todos por vuestro cariño. Siempre Recre», indicaba en sus redes sociales, en las que también lanzaba una emocionada carta en la que también recogía algún 'dardito' hacia los responsables de su despido.

«En contra de mi voluntad me han obligado a terminar mi relación laboral con el club de mi vida», indicaba en la misma Antonio Zarria, que añadía que «se extingue la relación laboral porque la sentimental, la pertenecer a algo que es mucho más que un equipo o club de fútbol, no me la podrán arrebatar nunca, y menos aquellos para los que este escudo centenario y pionero no es más que un instrumento al servicio de sus intereses particulares».

Eso sí, quería excluir de las críticas a uno de los consejeros del Decano, Antonio Manuel Carrasco, al que le agradecía «estos seis meses en los que pudimos coincidir, siempre intentando ayudarme cuando lo necesité y estuvo en sus manos, sin cobrar ni un duro y quedándose siempre al margen de las decisiones tomadas por los que verdaderamente manejan el club».

Señala que ha «saboreado lo mejor y lo peor de este deporte en años muy intensos». Y se acordaba de la afición, de los trabajadores del club, de muchos entrenadores, jugadores o directores deportivos, además de dos presidentes como José Antonio Sotomayor y Manolo Zambrano, «que me valoraron y me trataron como un profesional».