Octubre, el mes clave para desbloquear la guerra de Pablo Comas y el Ayuntamiento de Huelva con el Recreativo como mercancía

Se conocerá la respuesta, casi seguro que negativa, al recurso de casación presentado por el Decano para que prospere la expropiación hecha en 2016

Hay un grupo inversor extranjero que ha solicitado una nueva reunión para conocer más detalles económicos y decidir si quiere comprar el club

El Recreativo busca una tercera vía y le pide a la Junta la protección plena de las acciones de la SAD como BIC

El TSJA falla a favor de Pablo Comas, que recupera la propiedad del Recreativo de Huelva

Pablo Comas está a punto de volver a desembarcar en el Recreativo de Huelva abc
R. Ubric

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Octubre se antoja un mes totalmente clave para conocer el devenir institucional del Recreativo de Huelva, que lleva metido una década en un complicado galimatías que incluso le llevó a rozar la desaparición. Para evitarla, en el año 2016 el Ayuntamiento se convirtió en el dueño del Decano al expropiarle las acciones al que era su presidente, Pablo Comas (Gildoy España S. L.) con la justificación de que el club albiazul era un Bien de Interés Cultural (BIC). Pero tras una época de calma tensa y de relativa tranquilidad, el pasado mes de enero la justicia revocó esa sentencia de la Audiencia Provincial y le devolvió las acciones, es decir, la propiedad del Recre, al empresario madrileño.

A partir de ahí los servicios jurídicos del consistorio onubense reaccionaron con un recurso de casación ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) y el Tribunal Supremo (TS), y se espera que en octubre se conozca si pasa la primera criba y lo admiten. Todo apunta a que eso no va a suceder, con lo que el Decano volverá a pasar a estar en manos de Pablo Comas, que deberá tomar de manera inmediata las riendas del club, cesar al consejo de administración que preside Jesús Vázquez y finalizar la actual temporada 2024/25 en sus dos frentes.

En el deportivo sería perjudicial, a no ser de que en el mercado invernal aportara músculo económico y llegaran fichajes. No hay más que ver cómo la pasada campaña justo después de conocerse la noticia de la revocación de la expropiación el equipo cayó en picado en la clasificación y acabó fuera de los puestos del 'play-off' de ascenso. Incluso en la temporada 2011/12, cuando el propio Comas llegó con Gildoy al Recre, también se marchó Álvaro Cervera en plena temporada y el equipo albiazul sufrió bastante para lograr la permanencia en la categoría de plata. tanto vaivén institucional en plena campaña suele afectar a los profesionales.

Cuatro millones de euros en marzo

Y en lo económico no sólo hay que abonar el sueldo de futbolistas y demás trabajadores del Decano sino, lo más importante esta campaña, pagar alrededor del mes de marzo cuatro millones de euros, casi todos ellos destinados al último pago de Hacienda. Una cita clave que de no cumplir la entidad albiazul de nuevo la pondría al borde de la desaparición, y con Pablo Comas al frente nunca se sabría lo que puede ocurrir, y es que ya en su día lo dejó ir muriendo paulatinamente por inacción.

El Ayuntamiento de Huelva, consciente de que tiene casi todas las de perder con el recurso de casación, está en las últimas semanas intentando blindar al Recre de todas las maneras posibles y acaba de presentar ante la Junta de Andalucía la posibilidad de ampliar la protección de las acciones de la Sociedad Anónima Deportiva (SAD) como BIC. Pero la opción que más le interesa a todas las partes implicadas en la ecuación, porque tarde o temprano el Decano tiene que dejar de estar en manos municipales, es la de la venta del club a un grupo empresarial solvente y que sea capaz de caminar en el futuro de la mano del propio consistorio para ir limando la deuda económica y acercándose en lo deportivo al fútbol profesional.

El Ayuntamiento le presentó hace unos meses a Pablo Comas una oferta del grupo que comandan Coke y Juan Cala, exfutbolistas que ya invirtieron en el Atlético Sanluqueño, pero al madrileño le pareció irrisoria y ni siquiera contestó a la propuesta, que era de alrededor de dos millones de euros. Pero el propio dueño de Gildoy tampoco quiere ni que el asunto se enquiste y prolongue eternamente en el tiempo, ni volver a Huelva, donde su figura es antipopular, ni quedarse sin el dinero que supuestamente puso en su día en el Decano. Y por eso también está poniendo de su parte para buscar un comprador que le convenza tanto a él como al consistorio onubense.

LABOR DE VIGILANCIA

El Ayuntamiento siempre seguiría con presencia en el consejo de administración al tener el 23% del accionariado del club a través de Huelva Deporte

Llegar a un entendimiento no parece fácil, pero hablando se entiende la gente y por ahora los dos primeros acercamientos que ha habido han sido positivos. Después del primero, que se produjo hace unos 15 días, tuvo lugar otro este pasado fin de semana en Sevilla, tal y como reconoció el teniente de alcalde y concejal de Economía en el Ayuntamiento, Francisco Muñoz, que también ha desvelado que próximamente va a haber otra reunión en la que ya se ahondará más en detalles económicos importantes para ver si puede concretarse una venta que desbloquearía el polémico entramado en el que está actualmente envuelto el club más antiguo de España.

Se trata de un grupo extranjero que ya ha invertido en otros clubes de fútbol, por lo que contaría con experiencia a la hora de desembarcar en el Decano. El Ayuntamiento, que siempre seguiría con presencia en el consejo de administración del Recre, al tener el 23% de su accionariado a través de Huelva Deporte, tiene referencias positivas de las personas que lideran este fondo inversor y además facilitaría la venta siempre y cuando estén dispuestos a saldar las deudas que el Decano tiene con el consistorio, que ascienden a un mínimo de 15 millones de euros (además, habría que analizar también los pormenores del 'caso estadio', y es que el Nuevo Colombino es de propiedad municipal).

Convencer con dinero a Comas

Esa es una de las patas a resolver, la del acuerdo entre el grupo inversor y el Ayuntamiento. Y lógicamente la otra, igual o más importante, es la de que convenzan con su oferta económica al que va a ser casi con toda probabilidad a partir de octubre o noviembre de nuevo el propietario del Recre, un Pablo Comas que parece complicado que acepte menos de 10 millones de euros por sus acciones.

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