Ahora sería injusto (y ventajista) criticar al capitán del Recreativo
Rubén Gálvez va a encajar más goles que la pasada campaña y no está siendo héroe en tantos partidos, pero sigue siendo de los mejores del Decano
Bajó al lodo para devolver al club de su tierra al fútbol profesional y el grave error del domingo ante el Betis Deportivo le hará más fuerte por su carácter
Rubén Gálvez: «El año pasado era el mejor y este año cualquier gol es fallo mío y ni una cosa ni otra»
Rubén Gálvez: «Perdí mucho dinero para volver al Recre, aunque mucha gente no se lo crea, pero no me arrepiento de la decisión»
Cuando un equipo está en mala dinámica hasta sus mejores jugadores se contagian y cometen errores incomprensibles e inhabituales. Es lo, que por ejemplo, le ocurrió este pasado domingo a Rubén Gálvez, que regaló el segundo tanto a Destiny, delantero del Betis Deportivo. Un error de esos que a algunos futbolistas, y más a los porteros, les puede condicionar de cara al futuro más inmediato. Pero no al capitán del Recreativo de Huelva, que ha demostrado siempre que se crece siempre ante las adversidades y que desde ya se ha conjurado en volver a brillar y a liderar a su equipo en la recta final de la temporada.
Es verdad, y él mismo lo ha reconocido públicamente, que esta campaña el 'gato de Aracena', que tiene contrato en vigor con el Decano hasta el año 2027, no está al nivel tan espectacular y sobrado del pasado curso, en el que posiblemente fue el mejor portero de la Primera RFEF con actuaciones determinantes que ayudaron a que el conjunto onubense sumara muchos puntos. Lo que pasa es que el error de un portero (o un defensa) se engrandece mucho más de cara al aficionado y al periodista que el de un delantero, y ahora muchos recuerdan el error de Rubén Gálvez ante el filial verdiblanco pero no que ya había evitado un par de claras ocasiones de gol muy peligrosas del adversario.
En casi todos los encuentros sigue haciendo paradas salvadoras, lo que no quita para que vaya a empeorar con total seguridad sus números de las últimas campañas. Así, en la pasada recibió 35 dianas en 37 jornadas de liga, mientras que en la actual ya lleva 34, es decir, sólo una menos, en 27 partidos. Hace dos, en la Segunda RFEF, encajó 23 goles en 37 partidos, y hace tres, en la Tercera RFEF, únicamente 16 en 30 choques.
Formado en las categorías inferiores del Recre, y con 31 años de edad, se encuentra desde hace un par de campañas en el mejor momento deportivo de su carrera. En pleno grado de madurez tanto fuera como dentro del campo y siendo una pieza muy importante a la hora de ser un gestor de vestuarios con los más jóvenes y los entrenadores. Un buen capitán que da la cara, no se esconde y al que esto le duele como al que más, de ahí que va a poner todo el empeño por lograr la permanencia en las 11 jornadas que quedan, confiando en que el nuevo proyecto albiazul, ya con nuevos dueños, permita aspirar a tener una plantilla más competitiva y con más aspiraciones.
Debut con el primer equipo
A los 18 años pasó del juvenil al Atlético Onubense en Tercera División y a la temporada siguiente, la 2012/13, debutó ya en Segunda División jugando dos partidos. Tras una campaña cedido en el Huesca, volvió al Decano para disputar 16 choques en la categoría de plata. Después jugó otros 35 y 30 en Segunda B y, tras pasar un curso en blanco a la sombra de Marc Martínez, tuvo un alto rendimiento también en Segunda B dos ejercicios en el San Fernando y otro en el Melilla.
En el verano de 2021 puede decirse que fue el fichaje estrella del director deportivo Dani Alejo para el equipo onubense. No le importó bajar dos categorías de golpe y porrazo y renunciar a un mejor contrato económico. Siente los colores y el tiempo le está dando la razón, ya que no parará hasta llevar a su Recre al fútbol profesional más de una década después. Además, ya es el guardameta que más partidos ha vestido la elástica albiazul en la historia, con más de 200.
