Así podría arrebatar Huelva a Asturias el cetro español del oro
Los yacimientos emergentes de La Romanera y El Cura, junto con la histórica mina de Riotinto, destacan en el resurgir aurífero de Huelva, que apunta a cifras récord en los próximos años
El resurgir de la minería metálica en Huelva
Experiencia única en Huelva: Viaje al centro de una mina a pleno rendimiento
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Aunque el trono del oro en España sigue en tierras asturianas, con la histórica mina de Boinás-El Valle al frente, Huelva amenaza con irrumpir con fuerza y disputarle este liderazgo con tanta carga simbólica. Durante años, Asturias ha sido sinónimo de la extracción aurífera nacional, pero la entrada de nuevos proyectos y el desarrollo de explotaciones emergentes en la Faja Pirítica Ibérica plantean un escenario en el que la provincia onubense podría convertirse en el nuevo 'El Dorado' español.
La producción de oro en el país ha tenido una trayectoria ascendente en la última década, superando en 2021 los 1.800 kilogramos y con incrementos porcentuales muy notables respecto a años anteriores. Sin embargo, el panorama seguía dominado por Asturias, gracias a la extracción concentrada en las minas de Boinás-El Valle y Carlés. No en vano, Orovalle (de la empresa de matriz canadiense Orvana Minerals Corp) está reportando anualmente algo más de 1.200 kilos de oro, consolidando así la hegemonía del Principado.
Frente a este historial, las cifras del resto de España resultan modestas. De hecho, solo despunta Huelva, donde Atlantic Copper, sin ser una mina de oro, produce este metal como un valioso subproducto de su principal actividad, la fundición de cobre. Más allá de eso, no había grandes explotaciones auríferas en activo. Pero la situación está cambiando a pasos agigantados gracias a la actividad de varias compañías que se han volcado en la búsqueda y la extracción de oro en el suroeste peninsular.
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El caso más destacado es el Proyecto Iberian Belt West (IBW) de Emerita Resources, compañía también canadiense, que abarca yacimientos tan prometedores como La Romanera, El Cura y La Infanta. De momento, el éxito más sonado procede de La Romanera, donde han logrado una tasa de recuperación del 64,3% a través de un proceso metalúrgico en dos etapas, rematado con un tratamiento post-flotación que no emplea cianuro. Aunque este porcentaje se sitúa por debajo del rango habitual en explotaciones ya consolidadas (70-95%), la compañía subraya que es solo un punto de partida y que podría mejorar conforme avancen las pruebas. Ese potencial de crecimiento hace pensar que la producción final de oro en Huelva podría acercarse a cotas muy elevadas.
No es la única explotación que podría desafiar el reinado asturiano. El Cura ha evidenciado intersecciones de alta ley que incluyen una importante presencia de oro y cobre; en paralelo, la suma de La Infanta y de nuevas perforaciones en El Cura mantiene viva la expectativa de un gran salto cuantitativo en este preciado recurso. Se espera que, para principios de 2025, Emerita publique una estimación de recursos minerales actualizada que confirme el alcance real de sus depósitos.
A esto se suma la ya conocida mina de Riotinto, operada por Atalaya Mining, cuyo foco principal es el cobre pero que también obtiene oro como subproducto. Aunque la empresa no detalla con precisión las cifras auríferas, sí se sabe que en el tercer trimestre de 2024 produjo unas 11.900 toneladas de cobre y planea abrir la bocamina del proyecto Masa Valverde a comienzos de 2025. Dado que una fracción del mineral extraído suele contener oro, es razonable prever que la producción total en la provincia crezca aún más.
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Los datos disponibles indican, además, que Huelva concentra el 71% del valor de la producción minera de Andalucía y el 99% en el subsector de minería metálica. Estas cifras hablan de su enorme potencial de crecimiento, especialmente si las nuevas explotaciones confirman el ritmo previsto de extracción aurífera. La posibilidad de que la suma de oro proveniente de La Romanera, El Cura, Riotinto y Masa Valverde se acerque o incluso supere la producción de Boinás-El Valle, refuerza la idea de que en Huelva se está gestando un nuevo centro neurálgico del oro en España.
No obstante, es fundamental tener en cuenta que la producción real dependerá del rendimiento metalúrgico, de las leyes del mineral que allí se localice y, como es lógico, de cómo fluctúe el mercado internacional. El oro es un metal cuyo precio ejerce una atracción inmediata sobre inversores y compañías mineras, pero también
Asturias, de momento, conserva su reinado, pero las explotaciones de Huelva avanzan a pasos de gigante y podrían, en un futuro cercano, plantarle cara y erigirse en el nuevo 'El Dorado' hispano
implica riesgos en cuanto a costes de producción y licencias ambientales. Emerita Resources, Atalaya Mining y las autoridades locales confían en que la minería moderna, basada en procesos más respetuosos con el entorno, permita un crecimiento estable y beneficioso para la región.
Asturias, por lo tanto, de momento conserva su reinado, pero las explotaciones de Huelva avanzan a pasos de gigante y podrían, en un futuro cercano, plantarle cara y erigirse en el nuevo 'El Dorado' hispano; también con permiso del norte, ya que aquella región alberga el yacimiento de oro más grande de Europa sin explotar, ubicado en Salave, Tapia de Casariego, que se estima contiene alrededor de 30 toneladas de oro. No obstante, la próxima publicación de estimaciones de recursos y el arranque de nuevas plantas de tratamiento serán determinantes para confirmar si Huelva está lista para derrocar al rey asturiano y situarse en el mapa de la extracción de oro, con todo su simbolismo, como el nuevo polo de referencia en nuestro país.