El acuerdo sobre las captaciones del Bocachanza las limita a un máximo de 42 hectómetros cúbicos, alejado de la demanda de los regantes onubenses
Huelva Riega considera que es un volumen insuficiente y aboga además a poder usarlo sin límite de meses
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Conocidos los detalles del acuerdo de uso del Bocachanza tras la XXXV Cumbre Hispano-Lusa de Faro, los regantes onubenses han valorado ciertos avances que, sin embargo, no satisfacen al completo sus demandas, tal y como han querido dejar claro.
Lo han hecho a través de un comunicado las comunidades de regantes de Huelva, reunidas en Huelva Riega, que pese a valorar la «seguridad jurídica que aporta el acuerdo», lo ven insuficiente ante las necesidades de agua que presenta la provincia.
Según el acuerdo entre ambos ejecutivos, el español y el portugués, el «volumen que obtendrá Huelva de Bocachanza, con la infraestructura actual y las nuevas reglas, será el 50% del que tenemos ahora en época de sequía», considerando además los regantes que el pacto se ha cerrado «sin tener en cuenta las limitaciones técnicas de la infraestructura».
Es «una solución endiablada», han llegado a afirmar desde Huelva Riega tras el encuentro mantenido este jueves con el presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana, Samuel Moraleda. Y es que, pese a que el uso de las aguas internacionales de Bocachanza se consolida para el sistema de riego en Huelva, con bombeos autorizados entre los meses de octubre y abril «sin necesidad de que haya situación de necesidad, como hasta ahora», las cantidades se consideran insuficientes.
El acuerdo establece tres regímenes de uso y volúmenes: seco (30 hm3); intermedio (60 hm3); y húmedo (sin límite de hectómetros, llegando hasta donde Huelva pueda bombear).
«Esto supone ahora un máximo de 42 hm3 al año» que, a juicio de Huelva Riega, «agrava la situación del sistema hídrico onubense porque es un volumen total insuficiente para los usuarios del agua -consumo humano, agricultura, industria y turismo- y no tiene en cuenta el déficit de 80 hm3 que tiene Huelva».
Necesidad de nuevas infraestructuras
Ante este planteamiento, las comunidades de regantes hacen hincapié en que, «con independencia del volumen, si no viene acompañado de nuevas infraestructuras, no es una solución».
De este modo, no se renuncia a las reclamaciones históricas sobre las presas de Alcolea, Coronada y Pedro Arco «para tener capacidad de almacenar lo que bombeemos y poder usarlo en situación de necesidad».
La situación hídrica de la provincia y el contexto de sequía de los últimos tiempos las convierten en más fundamentales si cabe; pero mientras se materializan, desde Huelva Riega instan «a que Bocachanza funcione durante todo el año, sin límite de uso por meses, con los volúmenes actuales, hasta que no estén finalizadas las infraestructuras necesarias para dar cumplimiento al convenio».
«Huelva no puede esperar más, están poniendo en riesgo de colapso la agricultura, la industria y el turismo, modelos ejemplares y de referencia en el mundo», sentencian desde las comunidades de regantes onubenses.
Otras valoraciones
También por parte de la Junta de Andalucía el delegado del Gobierno en Huelva, José Manuel Correa, ha señalado que la propuesta en cuanto a recursos hídricos «no convence» porque, a su juicio, «no da respuesta a las necesidades que tiene esta provincia».
«Huelva es una provincia turística, agrícola e industrial, por lo que con la propuesta planteada creemos que la situación empeora en cuanto al suministro o posible trasvase del a través del acuerdo de Albufeira», ha concluido.