San Sebastián paseó por Huelva su bastón de mando como nuevo alcalde perpetuo
Pese a recortarse el itinerario a causa de las condiciones climáticas, Huelva pudo disfrutar de la procesión del patrón por las calles del barrio Alto
La procesión de San Sebastián por Huelva, en imágenes
«San Sebastián, saca a las mocitas a pasear y por las tarde se mea en el delantal». Así reza un antiguo dicho popular onubense sobre la festividad del patrón. Un dicho que en este año 2025 ha vuelto a cumplirse, convirtiéndose la lluvia en protagonista de una jornada en la que San Sebastián ha recibido de manos de la alcaldesa el bastón de mando de la ciudad.
A las diez de la mañana daba comienzo la solemne función a San Sebastián, presidida por el obispo de Huelva, Santiago Gómez. Al acaba la ceremonia religiosa, comenzaba a organizarse en el interior de la Parroquia de San Sebastián la procesión del santo, empezando a correr la noticia del recorte de itinerario a causa de la lluvia. Se frustraba así el nuevo itinerario propuesto para este año, no pudiéndose ver a San Sebastián por el enclave de Santa Fe o subiendo la cuesta de las Tres Caídas.
Los sones de la Banda de cornetas y tambores Jesús Nazareno comenzaban a sonar en las afueras del templo, cruzando la cruz alzada el dintel de la iglesia pasadas las once de la mañana. Comenzaba así a salir las diferentes representaciones de las hermandades de penitencia y gloria de la ciudad, con las habituales ausencias que cada año se repiten. Tras ellas las distintas representaciones civiles y militares, cerrando el cortejo las hermandades de la parroquia y la corporación municipal, con la alcaldesa Pilar Miranda bajo mazas.
A sones de Silencio Blanco daba la primera chicotá sobre el porche de San Sebastián, bajo un cielo cubierto. Los cohetes resonando en el cielo y el tañer de las campanas completaban en espacio sonoro de la salida. Se iniciaba así la salida de San Sebastián, en un año marcado por el su inminente nombramiento como alcalde perpetuo de la ciudad. Por ese motivo, las andas procesionales lucían a los pies del santo el arcángel que Jesús Domínguez labrara en plata para la Virgen de la Cinta.
Unas andas que lucían un exorno floral en tonos rojos, color propio del santo mártir. Exorno que contrastaba con el blanco de las plumas y el dorado de la coraza que completaban el conjunto del paso. San Sebastián lucía prendido de su banda bordada en oro la Medalla de Huelva y la de la Orden de San Sebastián. Entre palmitos y la devoción de los onubenses que se congregaban en la salida, en patrón se encaminaba hacia la plaza de los Litris, donde lo esperaba la Banda Sinfónica de Huelva.
«Manolito Litri» y «Mi Huelva tiene una Ría» ponían banda sonora a su llegada al bario alto, donde minutos después la Hermandad del Santo Entierro recibía al patrón a las puertas de la Ermita de la Soledad. Minutos después, llegaba el momento principal de la jornada. Con todas las hermandades y la Huelva cofrade llenando la Plaza de San Pedro, el paso de San Sebastián se colocaba bajo la escalinata de la Parroquia Mayor de San Pedro. Una alfombra de romero servía de escenario para el acto de entrega del bastón de alcalde perpetuo de la ciudad.
Tras ser bendecido por el obispo de Huelva, Pilar Miranda entregaba el bastón de mando al hermano mayor de los Estudiantes, Pablo Marchena. Dicho bastón fue colocado a los pies de San Sebastián a los sones del Himno de Huelva. Una lluvia de pétalos en la siguiente chicotá ponía el broche a este emotivo momento. Daba inicio el recorrido de vuelta cuando comenzaba a caer una fina llovizna sobre la plaza de San Pedro. Una lluvia que motivó el cambio de recorrido, regresando San Sebastián sobre sus pasos.