El gran bulevar del Molino que conectará la ciudad con el Muelle de Levante será realidad en menos de cinco años
Es la previsión que maneja el Grupo Urbanz, empresa que lidera el proyecto y que protagonizará el «renacer urbanístico» de la barriada con residenciales como Tres Vela y Alma del Odiel
El grupo Urbanz empieza la comercialización de un centenar de viviendas en Huelva
La promotora de 'Tres Velas' modificará el proyecto reduciendo la altura de las torres para adaptarse a Costas
Vistas a la ría o piscina comunitaria entre los atractivos de la nueva promoción de viviendas del Molino de la Vega
Huelva está a punto de experimentar una transformación urbanística que significará un antes y un después en su fisonomía en un horizonte de solo cinco años. El ambicioso proyecto del gran bulevar del Molino, liderado por el Grupo Urbanz, no solo promete revitalizar una de las zonas más emblemáticas de la ciudad, sino también conectarla con el futuro desarrollo del Muelle de Levante. Este eje transformador, esperado durante más de dos décadas, combinará «sostenibilidad, modernidad y funcionalidad» para ofrecer un espacio urbano «a la altura del siglo XXI».
La Avenida del Molino de la Vega, históricamente una zona transitada aunque olvidada en términos de desarrollo urbano, será el epicentro de esta transformación. Según Aurelio Cazenave, arquitecto responsable del proyecto, el bulevar «representa el futuro real de Huelva», ya que no sólo renovará el Molino de la Vega, sino que conectará de manera estratégica y estética con el Muelle de Levante, un desarrollo que se espera revitalice toda la fachada portuaria de Huelva; un paso decisivo hacia «la primera conquista de Huelva al río», una integración necesaria entre la ciudad y su entorno natural.
Tres Velas y Alma del Odiel
El primer paso hacia la realización del gran bulevar del Molino es el desarrollo de Tres Velas, un conjunto residencial de 100 viviendas que destaca por su diseño «innovador y sostenible». Este proyecto, cuya construcción comenzará en el verano de 2025, ha sido diseñado para ser un símbolo del «renacer urbanístico de Huelva», como la empresa lo define. Aunque inicialmente estaba previsto que las torres tuvieran 12 plantas, una modificación en el plan urbanístico redujo la altura a nueve, respetando los lineamientos establecidos por la Ley de Costas.
Pese a estos ajustes, Cazenave asegura que el proyecto no ha perdido su esencia: «Las tres plantas menos no son óbice para seguir adelante. El diseño mantiene su vanguardia y ofrece un nivel de calidad de vivienda que es estratosférico». Estas edificaciones no solo renovarán el skyline de la ciudad, sino que ofrecerán viviendas «accesibles y modernas» que ya han generado gran interés en el mercado inmobiliario onubense.
Otro componente clave de esta transformación es Alma del Odiel, un desarrollo residencial de 54 viviendas que también forma parte del plan urbanístico liderado por Urbanz. Este proyecto, que ya cuenta con licencia urbanística, refuerza la apuesta de la empresa por un modelo de vivienda cooperativa. Con un 60% de reservas confirmadas, según reveló el Grupo Urbanz, pone en evidencia la alta demanda de viviendas modernas y adaptadas a las necesidades actuales.
Ambos desarrollos, Tres Velas y Alma del Odiel, actúan como catalizadores del cambio en el Molino de la Vega, un barrio que ha sido históricamente residencial y que ahora verá experimentará una renovación total. «El Molino tiene vida, lo que pasa es que siempre ha estado más conectado a la Avenida de las Palmeras», algo que cambiaría con este proyecto, explica Cazenave, quien añade que esta nueva etapa traerá consigo una avenida diseñada para la convivencia entre el coche y el peatón, con espacios verdes que transformarán el paisaje urbano de una barriada caracterizada hasta hace no muchos años por tener grandes superficies de espacio degradado.
Un bulevar «del siglo XXI»
Para sus promotores, el diseño del gran bulevar del Molino no es solo una apuesta arquitectónica, sino también un compromiso con la sostenibilidad y la calidad de vida. Cazenave lo describe como «un bulevar del siglo XXI, diseñado en el siglo XX, pero con la vista puesta en el futuro». Este espacio combinará zonas peatonales y áreas verdes con edificaciones modernas que atraerán tanto a residentes como a inversores.
Además, este desarrollo responde a una necesidad urgente de renovación del parque de viviendas de Huelva. «El parque de vivienda de la ciudad es antiguo y, en muchos casos, no es cómodo ni accesible», señala. Proyectos como Tres Velas y Alma del Odiel, señala la empresa, ofrecen una alternativa para quienes buscan calidad de vida en el centro de la ciudad.
Conexión estratégica
Uno de los aspectos más destacados del gran bulevar del Molino es su conexión directa con el Muelle de Levante, un desarrollo que promete ser otro eje transformador para Huelva. Según el arquitecto, esta conexión permitirá que la Avenida del Molino se convierta en uno de los grandes bulevares de la ciudad, al estilo de la Avenida de Andalucía, uniendo de manera funcional y estética la vida urbana con el entorno fluvial.
El bulevar también facilitará una movilidad más sostenible y promoverá la vida peatonal, aspectos que ya son fundamentales en el diseño urbano del siglo XXI. Cazenave subraya la importancia de esta transformación: «En cinco años, esta rotonda –en referencia a la que se encuentra frente al Colegio Francés y al centro comercial Aqualon– se nos quedará pequeña. Este sí es el futuro real de Huelva».
Este nuevo paseo, apunta el arquitecto, no solo mejorará la calidad de vida de los vecinos del Molino de la Vega, sino que también contribuirá a posicionar la capital onubense como una ciudad moderna y sostenible. «El compromiso de Urbanz con este proyecto va más allá de la construcción de viviendas; es un compromiso con la ciudad y su desarrollo», añadió.
En palabras de Cazenave, este es «un bulevar diseñado para el siglo XXI, con edificaciones que reflejan una nueva etapa para Huelva». Y aunque todavía queda mucho por hacer, los avances hasta la fecha demuestran que esta ambiciosa visión está cada vez más cerca de convertirse en realidad. En menos de cinco años, el bulevar del Molino será un referente para la ciudad y un ejemplo de cómo la arquitectura y el urbanismo pueden transformar un espacio y darle nueva vida.