La expresión de nuestro legado

Una aguja en un pajar

Es curioso como algunas joyas de la arquitectura forman parte de nuestra vida diaria y no somos conscientes de ello. Pasamos por su lado una y otra vez, casi sin mirarlas, como si se trataran de un edificio más que da forma a la vía. Un ejemplo de ello podemos encontrarlo en la Calle Berdigón. Sencillo y elegante, el nº 15 se abre paso como precursor de un estilo en la capital. Ante nosotros la Casa de Cristóbal Yuste.

Una aguja en un pajar

Huelva24

Huelva

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Una aguja en un pajar

Suelo llamarla “La Casa Amarilla” porque su fachada está pintada de un amarillo terroso muy característico. Cuando paseo por la calle desde El Punto, la busco a lo lejos para al final detenerme un momento y observarla. Puede que parezca un edificio como cualquier otro, pero tiene algo especial. Está ahí, sin destacar, mirando desde sus ventanas el ir y venir del gentío con un aire solemne a la vez que descarado.

Dado que su autor es un célebre arquitecto de principios del s.XX, di por hecho que  las oficinas de turismo de nuestra ciudad informarían sobre su localización, la belleza de sus detalles y sobre su valor histórico. Pero no, me equivoqué. En ninguna de las oficinas a las que acudí tenían incluida la Casa de Cristóbal Yuste en su catálogo de lugares de interés. Es más, ni siquiera sabían de qué les estaba hablando.

Una aguja en un pajar

Lo interesante de este edificio es que pertenece, como decía,  a la primera etapa de producción del arquitecto. Cuando éste se licenció en la Universidad de Madrid primaban las tendencias tradicionales academicistas. Sin embargo y en contra de toda regla, el joven Aníbal se sintió más atraído durante sus primeros años por las formas vivas del modernismo, que venían desarrollándose desde finales del s.XIX en Cataluña y en otros centros europeos.

Para que entendamos la diferencia entre ambos estilos, podemos definir el modernismo como  una tendencia que pretende despertar los sentidos a través de la imaginación, expresándose con formas vegetales, curvas sinuosas y entrelazados decorativos. Mientras que la tendencia tradicional propia de la academia gustaba más de los convencionalismos clásicos, marcados siempre por líneas limpias y ordenadas.

Una aguja en un pajar

Hoy en día quedan pocas evidencias de su primera época como proyectista. La mayoría de edificaciones que realizó en la capital hispalense durante ese periodo fueron destruidas para ser sustituidas por obras de nueva construcción, lo que supuso una pérdida irremplazable para el mundo de las artes. Por esa razón la Casa de Cristóbal Yuste es tan valiosa, pertenece a su etapa de juventud profesional y muestra unos elementos modernistas cautivadores.

Si la comparamos con el resto de construcciones que erigió en la provincia de Huelva, parece que este fue el primer edificio que levantó en nuestras tierras. No solo podemos llegar a esa conclusión por las fechas de ejecución de cada una de sus obras, sino también por los detalles arquitectónicos que lucen sus estructuras.Si a esto sumamos que probablemente la tendencia modernista llegó a Huelva de manos del joven Aníbal al levantar esta casa, tal y como apunta en su libro “Huelva, la construcción de una ciudad” María Asunción Díaz Zamorano, podemos concluir que nos encontramos ante una joya de la arquitectura onubense con más valor del que parece a simple vista.

Una aguja en un pajar

Para aquellos que, como yo, aún sienten impotencia al recordar la pérdida de algunos de nuestros monumentos más importantes, tengo la dicha de informarles de que este edificio está en buen estado de conservación. Se sometió a una reciente restauración en la que se eliminaron los elementos decorativos de la parte superior de las puertas y ventanas de la fachada, algo innecesario en mi opinión, pero que no afectó demasiado a la personalidad de la construcción. Aunque se echan de menos esos detalles que resultaban tan originales e inusuales para la arquitectura de la época en nuestra ciudad.

El arquitecto usa un esquema austero y convencional, marcado por simetrías, sobre el que inserta líneas ondulantes y formas vegetales, lo que en resumen describe el lenguaje propio de sus primeras producciones modernistas.

Unas columnas decorativas realizadas en yeso enmarcan los límites laterales de la portada. Sus capiteles recuerdan a los motivos clásicos, con volutas esbeltas adornadas con una tímida ornamentación a base de hojas y  flores.

Una aguja en un pajar

En el interior, tras un recibidor custodiado por una puerta de hierro forjado que sigue la misma línea modernista, se abre una estancia donde se eleva la escalera que proyectó Aníbal González hasta la primera planta. En la actualidad su uso sigue siendo el mismo que en sus orígenes, lo que mantiene al edificio vivo y en buenas condiciones. La casa está habitada y la zona destinada a albergar una tienda está abierta al público para satisfacer sus necesidades.  

Gracias a la intervención de este arquitecto, parece ser que el modernismo llegó a nuestra ciudad. Durante un corto periodo de tiempo se siguió construyendo bajo esta tendencia, aunque no duró mucho, solo unos años. El gusto que se generalizó por los historicismos regionalistas y los modelos británicos terminaron por eclipsarlo. Aun así, podemos decir que su influencia marcó notablemente el desarrollo de nuestra arquitectura de principios del s.XX. Un claro ejemplo de ello lo encontramos en el interior del Palacio de Mora Claros, reformado en 1919 por José María Pérez Carasa, arquitecto que se licenció unos años después que Aníbal González en la misma universidad.

Ahora que muchos la han recordado y otros la han conocido, espero que la próxima vez que paseen cerca de la Casa Colón decidan pasar por delante y echarle un vistazo. Recuerden al observarla que todo tiene un principio y que para que algo sea valioso no tiene necesariamente que ser ostentoso. A fin de cuentas, los detalles son el alma de la belleza.

Referencia:-    Huelva, la construcción de una ciudad. Ayuntamiento de Huelva  (1999) María Asunción Díaz Zamorano.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación