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Ocho razones por las que Huelva es Capital Española de la Gastronomía 2017
El pasado 18 de octubre Huelva se convirtió en la Capital Gastronómica de España para el año 2017, tras quedar en segunda posición el año anterior en favor de Toledo. Una excelente oportunidad para mostrar al mundo uno de los signos distintivos de nuestra provincia que nos hace únicos. Razones para ello no nos faltan.

Pocos lugares pueden presumir de contar con tantos productos de calidad preciados en los mercados internacionales como auténticas delicatessen. En Huelva no sólo vivimos del jamón, porque puestos a comer, queremos el menú completo; desde el entrante, con unas gambas o unas coquinas de la costa, hasta el postre, con nuestras fresas y berries, sin olvidarnos de un buen guiso de chocos y el vino del Condado. ¿Alguien duda que Huelva merezca la distinción de capital gastronómica? Para los escépticos, aquí os dejamos algunos argumentos. Jamón de JabugoProbablemente no hay el mundo un pueblo de menos de 3000 habitantes más famoso en el mundo entero que Jabugo. Da igual en el idioma que hables o el lugar donde estés, si dices la palabra Jabugo, los ojos de cualquiera comenzarán a brillar y la segregación de saliva alcanzará niveles preocupantes. Porque en la Sierra de Huelva se elaboran los mejores jamones y paletillas del mundo a partir de la cría del cerdo ibérico, un animal de pura raza que vive feliz entre las encinas y alcornoques de nuestra dehesa. Bajo la Denominación de Origen Protegida Jamón de Jabugo, numerosos productores envían nuestra delicia gastronómica más preciada a todos los rincones del planeta, convirtiéndose en los últimos años en uno de los productos gourmet más cotizados a escala internacional, al nivel del foie o el caviar. Y lo tenemos aquí, en nuestra provincia. Tan sólo probando una loncha cualquier juez de la candidatura debería nombrar Huelva capital gastronómica 2017. Y tampoco podemos olvidar el resto de delicatesen derivadas del cerdo ibérico: caña de lomo, salchichón, chorizo, morcón, carnes frescas… ¡Hasta los andares! Desde luego, el cerdo debería ser proclamado el nuevo mejor amigo del hombre. Gamba blancaEs un hito traumático en la vida de todo aquel que prueba por primera vez una gamba blanca de Huelva, porque desde entonces, el resto le sabrán a poco. Es su textura, la delicadeza de su sabor; la gamba es la pequeña aristócrata del mar. Y nosotros la tratamos con mimo, respetando sus tiempos de cocción, con la sal justa, y en una terraza en la playa, que es donde mejor se degusta este manjar. Incluso se permiten ciertas licencias, como introducirla en una buena ensaladilla casera o en un arroz con fundamento. En Huelva nos gusta tanto que la echamos en cualquier fogón. Vinos del Condado de HuelvaTeniendo en cuenta que, con la documentación en la mano, el Condado de Huelva es una de las primeras zonas vitivinícolas de la península ibérica, no es de extrañar que en esta región la cultura del vino forme parte de la cultura y la tradición más arraigadas. La uva zalema es la reina sin discusión de las amplias extensiones de viñedos, que dan lugar a vinos blancos con personalidad, que parecen haber sido creados para acompañar a nuestros pescados de la costa. Pero no sólo eso, los brandys del Condado, como el Luis Felipe, son conocidos en todo el mundo, mientras que el vino de naranja es una creación original con su propia Denominación de Origen independiente a la que también disfrutan en resto de caldos de esta región. Porque los onubenses, además de ser de buen comer, son de buen beber. Mojama de Isla CristinaEl jamón del mar. No sólo porque cuando se corta muy fino tiene un parecido visual, sino porque su sabor es igualmente delicioso, uno de esos productos que provocan una verbena en nuestras papilas gustativas. Su elaboración, a partir del lomo de atún, se remonta miles de años atrás, desde los tartesios y fenicios que acudían a nuestras costas y conservaban el pescado en salazones para que durasen indefinidamente. La mojama, con Indicación Geográfica Protegida (IGP) de Isla Cristina, no es sólo producto gastronómico sin igual, sino parte de la cultura de la región, al igual que los pescados en conserva como caballa, melva o atún que también se elaboran en la zona desde hace siglos. El chocoOtro de los productos estrella onubenses, precisamente porque es principalmente en esta zona del Golfo de Cádiz donde se puede encontrar esta especie de sepia con mucha solera. En Huelva tenemos un doctorado en usos culinarios del choco en la cocina; lo hacemos fritos en tiras, enteros a la plancha, guisados con arroz y habas, en albóndigas, con papas…¡hasta los tallarines de choco se han inventado ya! Venir a Huelva y no probar el choco es como ir a Paris y no visitar la torre Eiffel. GurumeloEl gurumelo o amanita ponderosa es quizás la especie de hongo comestible más característica de Huelva. En nuestra provincia se pueden encontrar boletus, cantarelas, gallipernos, tanas, níscalos y un largo etcétera, sin embargo es el gurumelo la más popular, ya que sólo se puede encontrar en Huelva y en las zonas limítrofes de Badajoz y el Alentejo portugués. Es además un hongo difícil de recolectar, ya que se encuentra prácticamente enterrado. Pero su valor gastronómico es evidente. En Huelva lo hacemos en revuelto durante el invierno y podemos asegurar que vemos la luz, al menos en nuestro paladar. BerriesHuelva es el mayor productor de berries (fresas, frambuesas, moras y arándanos) de España y uno de los mayores exportadores de Europa. Por ello, a nivel culinario, no nos hemos quedado en las típicas fresas con nata de bote. Aquí las utilizamos, al igual que el resto de berries, en ensaladas, en gazpacho, en repostería… que dan ese toque diferente que puede hacer del plato algo único. Pescados y moluscosCon tantos kilómetros de costa bañada por el Atlántico, no es de extrañar que Huelva sea un paraíso para los amantes del pescado fresco, ese que parece que te mira con los ojitos aún llorosos. En cualquier lugar cerca de la playa podrás probar lenguados, rapes, corvinas, doradas y boquerones que casi llegan a la mesa brincando. Sin olvidar a la niña mimada, la coquina, un molusco de concha fina que es la debilidad de los onubenses, así como las chirlas, los berdigones o los longuerones. No queremos ser crueles y vamos a dejar de hablar, por ahora, de la gastronomía onubense, ya que hemos propuesto suficientes argumentos para que no haya duda de que sea Huelva capital gastronómica española en 2017. Después de conocer nuestros productos estrella, tan sólo queda… ¡probarlos!

Y tampoco podemos olvidar el resto de delicatesen derivadas del cerdo ibérico: caña de lomo, salchichón, chorizo, morcón, carnes frescas… ¡Hasta los andares! Desde luego, el cerdo debería ser proclamado el nuevo mejor amigo del hombre.
Gamba blancaEs un hito traumático en la vida de todo aquel que prueba por primera vez una gamba blanca de Huelva, porque desde entonces, el resto le sabrán a poco. Es su textura, la delicadeza de su sabor; la gamba es la pequeña aristócrata del mar. Y nosotros la tratamos con mimo, respetando sus tiempos de cocción, con la sal justa, y en una terraza en la playa, que es donde mejor se degusta este manjar. Incluso se permiten ciertas licencias, como introducirla en una buena ensaladilla casera o en un arroz con fundamento. En Huelva nos gusta tanto que la echamos en cualquier fogón.

Pero no sólo eso, los brandys del Condado, como el Luis Felipe, son conocidos en todo el mundo, mientras que el vino de naranja es una creación original con su propia Denominación de Origen independiente a la que también disfrutan en resto de caldos de esta región. Porque los onubenses, además de ser de buen comer, son de buen beber.
Mojama de Isla CristinaEl jamón del mar. No sólo porque cuando se corta muy fino tiene un parecido visual, sino porque su sabor es igualmente delicioso, uno de esos productos que provocan una verbena en nuestras papilas gustativas. Su elaboración, a partir del lomo de atún, se remonta miles de años atrás, desde los tartesios y fenicios que acudían a nuestras costas y conservaban el pescado en salazones para que durasen indefinidamente.
La mojama, con Indicación Geográfica Protegida (IGP) de Isla Cristina, no es sólo producto gastronómico sin igual, sino parte de la cultura de la región, al igual que los pescados en conserva como caballa, melva o atún que también se elaboran en la zona desde hace siglos.
El chocoOtro de los productos estrella onubenses, precisamente porque es principalmente en esta zona del Golfo de Cádiz donde se puede encontrar esta especie de sepia con mucha solera. En Huelva tenemos un doctorado en usos culinarios del choco en la cocina; lo hacemos fritos en tiras, enteros a la plancha, guisados con arroz y habas, en albóndigas, con papas…¡hasta los tallarines de choco se han inventado ya! Venir a Huelva y no probar el choco es como ir a Paris y no visitar la torre Eiffel.
GurumeloEl gurumelo o amanita ponderosa es quizás la especie de hongo comestible más característica de Huelva. En nuestra provincia se pueden encontrar boletus, cantarelas, gallipernos, tanas, níscalos y un largo etcétera, sin embargo es el gurumelo la más popular, ya que sólo se puede encontrar en Huelva y en las zonas limítrofes de Badajoz y el Alentejo portugués. Es además un hongo difícil de recolectar, ya que se encuentra prácticamente enterrado. Pero su valor gastronómico es evidente. En Huelva lo hacemos en revuelto durante el invierno y podemos asegurar que vemos la luz, al menos en nuestro paladar.

Pescados y moluscosCon tantos kilómetros de costa bañada por el Atlántico, no es de extrañar que Huelva sea un paraíso para los amantes del pescado fresco, ese que parece que te mira con los ojitos aún llorosos. En cualquier lugar cerca de la playa podrás probar lenguados, rapes, corvinas, doradas y boquerones que casi llegan a la mesa brincando. Sin olvidar a la niña mimada, la coquina, un molusco de concha fina que es la debilidad de los onubenses, así como las chirlas, los berdigones o los longuerones.

Pocos lugares pueden presumir de contar con tantos productos de calidad preciados en los mercados internacionales como auténticas delicatessen. En Huelva no sólo vivimos del jamón, porque puestos a comer, queremos el menú completo; desde el entrante, con unas gambas o unas coquinas de la costa, hasta el postre, con nuestras fresas y berries, sin olvidarnos de un buen guiso de chocos y el vino del Condado. ¿Alguien duda que Huelva merezca la distinción de capital gastronómica? Para los escépticos, aquí os dejamos algunos argumentos. Jamón de JabugoProbablemente no hay el mundo un pueblo de menos de 3000 habitantes más famoso en el mundo entero que Jabugo. Da igual en el idioma que hables o el lugar donde estés, si dices la palabra Jabugo, los ojos de cualquiera comenzarán a brillar y la segregación de saliva alcanzará niveles preocupantes. Porque en la Sierra de Huelva se elaboran los mejores jamones y paletillas del mundo a partir de la cría del cerdo ibérico, un animal de pura raza que vive feliz entre las encinas y alcornoques de nuestra dehesa. Bajo la Denominación de Origen Protegida Jamón de Jabugo, numerosos productores envían nuestra delicia gastronómica más preciada a todos los rincones del planeta, convirtiéndose en los últimos años en uno de los productos gourmet más cotizados a escala internacional, al nivel del foie o el caviar. Y lo tenemos aquí, en nuestra provincia. Tan sólo probando una loncha cualquier juez de la candidatura debería nombrar Huelva capital gastronómica 2017. Y tampoco podemos olvidar el resto de delicatesen derivadas del cerdo ibérico: caña de lomo, salchichón, chorizo, morcón, carnes frescas… ¡Hasta los andares! Desde luego, el cerdo debería ser proclamado el nuevo mejor amigo del hombre. Gamba blancaEs un hito traumático en la vida de todo aquel que prueba por primera vez una gamba blanca de Huelva, porque desde entonces, el resto le sabrán a poco. Es su textura, la delicadeza de su sabor; la gamba es la pequeña aristócrata del mar. Y nosotros la tratamos con mimo, respetando sus tiempos de cocción, con la sal justa, y en una terraza en la playa, que es donde mejor se degusta este manjar. Incluso se permiten ciertas licencias, como introducirla en una buena ensaladilla casera o en un arroz con fundamento. En Huelva nos gusta tanto que la echamos en cualquier fogón. Vinos del Condado de HuelvaTeniendo en cuenta que, con la documentación en la mano, el Condado de Huelva es una de las primeras zonas vitivinícolas de la península ibérica, no es de extrañar que en esta región la cultura del vino forme parte de la cultura y la tradición más arraigadas. La uva zalema es la reina sin discusión de las amplias extensiones de viñedos, que dan lugar a vinos blancos con personalidad, que parecen haber sido creados para acompañar a nuestros pescados de la costa. Pero no sólo eso, los brandys del Condado, como el Luis Felipe, son conocidos en todo el mundo, mientras que el vino de naranja es una creación original con su propia Denominación de Origen independiente a la que también disfrutan en resto de caldos de esta región. Porque los onubenses, además de ser de buen comer, son de buen beber. Mojama de Isla CristinaEl jamón del mar. No sólo porque cuando se corta muy fino tiene un parecido visual, sino porque su sabor es igualmente delicioso, uno de esos productos que provocan una verbena en nuestras papilas gustativas. Su elaboración, a partir del lomo de atún, se remonta miles de años atrás, desde los tartesios y fenicios que acudían a nuestras costas y conservaban el pescado en salazones para que durasen indefinidamente. La mojama, con Indicación Geográfica Protegida (IGP) de Isla Cristina, no es sólo producto gastronómico sin igual, sino parte de la cultura de la región, al igual que los pescados en conserva como caballa, melva o atún que también se elaboran en la zona desde hace siglos. El chocoOtro de los productos estrella onubenses, precisamente porque es principalmente en esta zona del Golfo de Cádiz donde se puede encontrar esta especie de sepia con mucha solera. En Huelva tenemos un doctorado en usos culinarios del choco en la cocina; lo hacemos fritos en tiras, enteros a la plancha, guisados con arroz y habas, en albóndigas, con papas…¡hasta los tallarines de choco se han inventado ya! Venir a Huelva y no probar el choco es como ir a Paris y no visitar la torre Eiffel. GurumeloEl gurumelo o amanita ponderosa es quizás la especie de hongo comestible más característica de Huelva. En nuestra provincia se pueden encontrar boletus, cantarelas, gallipernos, tanas, níscalos y un largo etcétera, sin embargo es el gurumelo la más popular, ya que sólo se puede encontrar en Huelva y en las zonas limítrofes de Badajoz y el Alentejo portugués. Es además un hongo difícil de recolectar, ya que se encuentra prácticamente enterrado. Pero su valor gastronómico es evidente. En Huelva lo hacemos en revuelto durante el invierno y podemos asegurar que vemos la luz, al menos en nuestro paladar. BerriesHuelva es el mayor productor de berries (fresas, frambuesas, moras y arándanos) de España y uno de los mayores exportadores de Europa. Por ello, a nivel culinario, no nos hemos quedado en las típicas fresas con nata de bote. Aquí las utilizamos, al igual que el resto de berries, en ensaladas, en gazpacho, en repostería… que dan ese toque diferente que puede hacer del plato algo único. Pescados y moluscosCon tantos kilómetros de costa bañada por el Atlántico, no es de extrañar que Huelva sea un paraíso para los amantes del pescado fresco, ese que parece que te mira con los ojitos aún llorosos. En cualquier lugar cerca de la playa podrás probar lenguados, rapes, corvinas, doradas y boquerones que casi llegan a la mesa brincando. Sin olvidar a la niña mimada, la coquina, un molusco de concha fina que es la debilidad de los onubenses, así como las chirlas, los berdigones o los longuerones. No queremos ser crueles y vamos a dejar de hablar, por ahora, de la gastronomía onubense, ya que hemos propuesto suficientes argumentos para que no haya duda de que sea Huelva capital gastronómica española en 2017. Después de conocer nuestros productos estrella, tan sólo queda… ¡probarlos!