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Tipos de alarmas de seguridad industrial
Para cualquier industria, es de suma importancia contar con un sistema de seguridad eficiente ya que deben proteger los diversos activos de alto valor. Una de las mejores alarmas para cumplir esta función es la alarma ADT. Es sumamente intuitiva y fácil de controlar por el usuario.
Comúnmente, suele suponer un problema para las alarmas convencionales proteger por completo una industria; al ser tan amplia su extensión, no suelen cubrir por completo todas las zonas. Para solucionar este inconveniente han surgido alarmas industriales de altísima sensibilidad.
Una alarma para el hogar puede ser instalada por el usuario si cuentas con ciertas habilidades para ello. Por el contrario, una alarma industrial requiere de personal con gran experiencia y habilidad; las alarmas industriales, al estar ubicadas en una extensión tan grande, no es tan sencillo colocarlas eficientemente.
El equipo experto se encargará de estudiar el entorno y su tamaño para determinar los lugares ideales para colocar los sensores. La idea de una alarma industrial es no dejar ningún rincón sin protección. Además, el usuario podrá elegir zonas especiales donde se enfocará la mayor seguridad.
Para colocar un sistema de alarmas de manera exitosa es necesario analizar el entorno y así, determinar qué equipo y accesorios son los necesarios. Su mayor variedad se encuentra en la cantidad de accesorios y en los niveles de sensibilidad requeridos para cubrir bien el espacio.
Estas alarmas suelen usarse en casa, pisos, jardines, suelos, cosas de verano, chalets o casas de campo. Comúnmente, cubren las zonas más sensibles de la vivienda como lo es la puerta principal y la trasera.
Aunado a ello, pueden ser instaladas en jardines o suelos, siempre tomando en cuenta que, si el usuario posee mascotas, podrían activarse. No están fabricadas para cubrir una extensión demasiado grande y pueden estar acompañadas de un sistema de cámaras de vigilancia exterior.
Estas alarmas son mucho más avanzadas en comparación con las utilizadas para los hogares. Antes de colocarlas se tienen en cuenta factores como el tamaño de la industria, el valor de los activos del interior, así como su ubicación.
Las alarmas industriales cuentan con un panel de control muy completo capaz de ofrecer diversas opciones de protección. Con base en lo anterior, poseen un circuito de vigilancia que en múltiples ocasiones cuenta con cámaras de seguridad. Sus sensores infrarrojos o de ondas son sumamente sensibles y logran cubrir todo el espacio.
A diferencia de las alarmas para el hogar, su panel permite saber en qué circuito y zona específica está ocurriendo el asalto. Por otro lado, poseen un sistema de priorización de zonas, es decir, es posible elegir qué lugar de la empresa requiere más cuidado para disponer el sistema para ello.
Con relación a lo anterior, el sistema se puede complementar con el control de acceso, un dispositivo instalado en la entrada de la industria o, en su defecto, en zonas de acceso para personal específico. De esta manera, es posible saber quién ingresa, a qué hora lo hace y a qué zona se introduce.
Las alarmas industriales con sistema de cámaras poseen en su panel una opción para monitorearlas personalmente. Sin embargo, hay empresas que contratan vigilancia asistida; de ese modo, las grabaciones son monitoreadas las 24 horas del día por personal dedicado a ello.
Para este tipo de alarmas solamente se paga la cifra de los equipos y la instalación; no requiere un pago mensual. Suele usarse para casas de verano o lugares donde no existan muchas pertenencias de valor.
Al pagar una tarifa mensual sobre el sistema de alarmas, el usuario accede a múltiples beneficios para garantizar la eficiencia. Esta modalidad de vigilancia se emplea en cualquier espacio, ya sea en casas, industrias, edificios, residencia secundaria, etc.
Entre sus muchas ventajas se encuentra la instalación realizada por un equipo especializado, y mantenimiento y verificación de fallos del sistema de vigilancia cada cierto tiempo. Por otro lado, permite contacto con la policía para el servicio de seguridad o sanitario, según sea la emergencia.
Con base en ello, se ofrece conexión directa con la central receptora de alarmas donde estarán en constante vigilancia para solucionar cualquier inconveniente. Después de analizado, informará a la policía del hecho para verificar la situación presentada en el establecimiento.
Las alarmas con cables permiten la conexión con el panel de control. Para instalarlas es necesario preparar la propiedad, realizar un trabajo en la pared para que los cables queden ocultos. De ese modo, no se cortará ni se dañará el cable de manera fácil.
Por otra parte, son inmunes a la inhibición y mucho más difíciles de hackear porque no se conectan directamente a una red de internet. Son las más típicas dentro de los estilos de alarmas.
Las alarmas inalámbricas han revolucionado el mundo de los sistemas de vigilancia con todas las ventajas que ofrecen. Para instalarlas no se requiere llevar a cabo una obra en la propiedad, por el contrario, cuentan con baterías para permitir su funcionamiento incluso si hubiese un corte de energía.
Su instalación es sencilla y rápida, dejando un bonito acabado en el espacio donde fue instalada. Se comunican con el panel de control a través de señales como el bluetooth. Se le pueden adaptar muchos más accesorios como cámaras de vigilancia y sistema de control de acceso.
Este sistema es el más vendido actualmente gracias a su versatilidad, su comodidad, su rápida instalación y el fácil uso para el usuario. Es ideal para cualquier tipo de propiedad, ya sea una casa pequeña o una industria sumamente grande; al ser inalámbrica puede utilizar múltiples sensores.
Para las industrias son las más convenientes ya que sería necesaria una inmensa obra para cubrir de cables las grandes dimensiones de los edificios. En cambio, con el sistema inalámbrico se subsana dicha problemática. Dicho esto, está claro cuál será la mejor elección.
