La remodelación de la plaza San Pedro descubre importantes restos de la Huelva andalusí
En una esquina de la plaza hay tres manzanas urbanas en torno a una calle principal de los siglos XII-XIII
De este mismo periodo hay restos junto a la iglesia que permiten analizar las distintas etapas históricas de su construcción
Estos restos, junto con el aljibe romano coronado por una cúpula del siglo XVI podrán ser contemplados por onubenses y visitantes
Así es el aljibe romano hallado bajo la plaza de San Pedro
La 'nueva' plaza de San Pedro integrará los restos arqueológicos: el aljibe romano que conecta con la Fuente Vieja será visible y visitable
La Huelva del pasado sigue surgiendo en el centro de la capital onubense y la remodelación de la plaza San Pedro ha permitido estudiar restos de la época andalusí, que en el mes de diciembre ya podrán ser contemplados por onubenses y visitantes, aunque en una fase posterior quedarán bien señalizados y protegidos.
El arqueólogo Jesús de Haro, director de la empresa de arqueología Alqueovalia, ha revelado ante los medios que en la esquina suroeste de la plaza de San Pedro, a un metro de profundidad, se han encontrado restos del periodo andalusí de los siglos XII-XIII. Se trata de tres manzanas urbanas analizadas y dispuestas en torno a una calle principal de cuatro metros de anchura, siendo esta por tanto «una arteria urbana bastante considerable, que ejemplifica un espacio noble».
Se han documentado en torno a la calle principal tres manzanas con estructuras habitacionales y calles secundarias, un entramado urbano que quedará expuesto a la intemperie para ser apreciado por la ciudadanía. Del Haro ha destacado que una integración en superficie supone «una prueba para la ciudadanía y tendremos que ir comprobando cómo nos vamos portando con estos restos de la ciudad».
Iglesia de San Pedro
Por otro lado, en el lateral de la iglesia San Pedro situado en la calle licenciado Juan Agustín de Mora, De Haro ha destacado que se han obtenido datos «prometedores» para la investigación. Los investigadores han podido confirmar la existencia de las distintas fases de construcción de la iglesia. Una primigenia fundacional del siglo XIV, una medianera en la que la iglesia crece hacia el este con una reforma gótico mudéjar en el siglo XV y «por primera vez hay evidencias de lo que hay por debajo de la construcción en el espacio donde se levanta la iglesia, donde las fosas constructivas aprovechan estructuras previas».
Algunos de estos materiales son sillares de la cimentación de la iglesia de San Pedro, en origen de una fase anterior y asociadas a esas estructuras previas hay «una canalización de gran porte, donde hemos podido documentar un ramal que conducía las aguas hacia un punto de la iglesia». La construcción de la iglesia rompe esa canalización de «una factura importante» que abastecía «una zona noble de la ciudad».
«No podemos hablar de que han aparecido parte de una posible mezquita»
Jesús de Haro
Arqueólogo
Ésta se fecha en la época almohade y está construida sobre los restos de una construcción de época cristiana que aprovecha otros materiales previos. «No podemos hablar de que han aparecido parte de una posible mezquita, pero las edificaciones previas datadas son del siglo XII-XII o incluso del periodo Taifa», ha expuesto el arqueólogo.
El experto ha lamentado que no se puedan ampliar los límites de la excavación, pero ha resaltado que cuentan con «datos muy importantes para la investigación y conocimiento de la evolución de las distintas edificaciones del periodo medieval» y de las superposiciones históricas que ha experimentado el entorno de San Pedro. Ahora se está estudiando y valorando el mejor modo de exponer estos restos, siendo a día de hoy la solución elegida una urna de cristal.
Un aljibe romano
El tercer punto con restos arqueológicos está en la esquina de la plaza de la calle La Fuente, donde ya se comunicó la aparición de un aljibe. El arqueólogo ha confirmado que lo que está a la vista forma parte de «una cúpula latericia de ladrillo del siglo XVI, confirmado con el análisis estratigráfico y en comparación con fuentes documentales». Esta se construye «sobre unos niveles romanos, una estructura que delata la ocupación romana de esta parte de la ciudad». Queda por investigar en «un análisis más profundo» si la estructura forma parte del mismo complejo del siglo XVI o si se ha realizado una reforma de algo anterior. Además, ha indicado que se va a poner en valor estos restos para ser visitados.
De Haro ha reconocido que para él es “un honor y privilegio” estar participando en una actuación “tan importante” y ha afirmado que se quita el sombrero ante el Ayuntamiento de Huelva y la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía por su “apuesta por el patrimonio”, que ha considerado “realmente histórica” y lo dice con “conocimiento de causa” tras una experiencia de 25 años. Asimismo ha roto una lanza por el trabajo del equipo de arqueología, compañeros y técnicos municipales de la obra ante una “ardua labor”.
"Vamos a ver en una sola plaza restos romanos, almohades y prealmohades y de la Huelva andalusí"
Pilar Miranda
Alcaldesa de Huelva
Por su parte la alcaldesa de Huelva, Pilar Miranda, ha felicitado también a todas las partes implicadas en este proyecto que posibilita que “vamos a ver en una sola plaza restos romanos, almohades y prealmohades y de la Huelva andalusí, con lo cual vamos a tener un contacto claro con todas las vicisitudes que ha tenido la construcción de la iglesia y la zona”.
La regidora onubense ha recordado que esta obra se ha realizado tras alcanzar un consenso con los vecinos y que una vez que termine se abrirá una nueva fase para poner en valor los restos arqueológicos aparecidos. “Es una apuesta decidida que nunca se había hecho en la ciudad por destapar y conservar y proteger y habrá que hacer la segunda actuación para poner en valor y conservar a vista de todas las personas estos restos arqueológicos”.
“Lo que se está haciendo por la cultura de Huelva no tiene precedente alguno”
Teresa Herrera
Delegada de Cultura de la Junta de Andalucía en Huelva
Teresa Herrera, delegada en Huelva e la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, ha subrayado que la ciudad está “de enhorabuena” porque con esta puesta en valor de los restos, “lo que se está haciendo por la cultura de Huelva no tiene precedente alguno”. “Por primera vez en Huelva vamos a poder ver las varias capas de cultura que nos preceden en nuestra seña de identidad”, ha recalcado.
Ha mostrado su agradecimiento al Ayuntamiento de Huelva por trabajar “codo con codo” con la Delegación que representa y ha apuntado que pese tener el condicionante de ir “a contrarreloj” se ha realizado un trabajo “de excelencia y calidad”.
“Vamos a seguir apoyando todo lo que significa darle luz y oportunidad a los restos tapados tanto tiempo y por fin tenemos un equipo de gobierno que muestra sensibilidad con nuestro patrimonio y con esta huella identitaria y hay que agradecer esta inmensa puesta en valor”, ha expresado Herrera, que ha destacado que estos “ilusionantes y apasionantes” descubrimientos van a ser todo un aliciente para que onubenses y visitantes puedan pasear por Huelva y encontrarse con su pasado.
Obra terminada “en tiempo y forma”
Felipe Arias, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Huelva, ha manifestado que la obra civil de la remodelación de la plaza San Pedro estará acabada “en tiempo y forma”, ya que tenían hasta el 31 de diciembre para ejecutarla y acogerse a los fondos Next Generation. En este sentido, ha valorado la “cooperación” entre administraciones, vecinos y empresa para sacar adelante el proyecto, que tenía una “espada de Damocles”.
Asimismo indicó que para una segunda fase quedará la intervención destinada a poner en valor los restos arqueológicos en las tres zonas mencionadas del entorno, con elementos “diseñados específicamente para hacer esta puesta en valor y se puedan disfrutar”.
De este modo, en esta segunda fase se van a conjugar restos expuestos a la intemperie, pero con barandillas para que no haya riesgo de caída y para proteger el patrimonio, como ocurrirá en la esquina de la plaza donde está la manzana andalusí, con una urna de cristal elevada y con elementos de ventilación, que es lo que cubrirá los restos del lateral de la iglesia de San Pedro.
“Por primera vez en la historia se aprovecha una remodelación de una zona tan céntrica e importante para hacer de ella una apuesta arqueológica”, ha concluido Arias, que ha recordado que se trata de un proyecto “rediseñado para que no tuviera el rechazo inicial de los vecinos”.
