ENTREVISTA
Rocío Márquez: «La sonrisa de la gente de Senegal me atravesó»
50 festival de cine iberoamericano de huelva
La protagonista de 'Senegal. Un sueño de ida y vuelta' invita a viajar con ella por los proyectos de cooperación y la música de una gente que ya lleva en el corazón
«Fluyó con mucha facilidad y espero que la gente al ver el documental y los momentos musicales también lo perciba así», destaca la cantaora onubense
Asegura que la vida de allí «me provocaba mucha admiración, muy alejada del individualismo, con un grado de cooperación altísimo, la unión de la familia, las formas de vivir, de celebrar, el impacto de los rituales, la proximidad con la naturaleza«
Marcos Gualda: «La presencia de la música se respira en cada poro de cada fotograma»
El documental 'Senegal, un sueño de ida y vuelta' estrena videoclip a cuatro días de su proyección en la 50 edición del Festival de Cine Iberoamericano
El largometraje de Marcos Gualda 'Senegal, un sueño de ida y vuelta' ya tiene fecha de estreno
La cantaora onubense Rocío Márquez regala destellos de la luz que porta en la voz por todo el mundo. Comparte el arte de un cante sabio y perfeccionado tamizado por un timbre inconfundible. Ella lleva el flamenco en el alma y lo proyecta como un faro. No podía ser de otra forma en el metraje de una película proyectado a nuestros ojos. Este sábado se estrenó en la Casa Colón, en el marco del 50 Festival de Cine Iberoamericano de Huelva, el documental dirigido por Marcos Gualda 'Senegal. Un sueño de ida y vuelta' y ella es protagonista. Aunque prefiere pensar que la música es el centro y que ella es un elemento más que gira junto a los artistas senegaleses y toda la gente de allí que conoció, quienes le acompañaron desde España. Planetas en torno a un sol de humanidad, solidaridad, cultura y alegría a pesar de todo.
Rocío Márquez ha regresado marcada. Una parte de ella aún está en África y una parte de ese continente lo lleva consigo y en ambos lados entonan recuerdos recurrentemente, como una canción que no se sale de la cabeza. Ha conquistado con su cante y su encantadora forma de ser y ha quedado prendada de la sonrisa limpia y profunda de una gente a la que se pretende ayudar y que nos enseña tanto. La magia del cine permite ahora que más personas vivan ese viaje.
PREGUNTA.- ¿Cómo ha sido la experiencia personal del rodaje y de convivir con la gente de Senegal?
RESPUESTA.- Ha sido uno de los grandes regalos que me ha dado la vida, una experiencia transformadora y me siento súper agradecida de formar parte de este proyecto que me ha traído tantísimo aprendizaje.
P.- ¿Qué significado le da a que se celebre en el marco del 50 Festival de Cine Iberoamericano y que tenga carácter solidario?
R.- Me emociona muchísimo. Resume bastante bien el carácter que tiene nuestra tierra, Huelva.
P.- ¿Qué destacaría del trabajo de cooperación que desempeña la Diputación de Huelva en Senegal?
R.- Destacaría la calidad humana de todas las personas que trabajan en un lado y otro en el día a día. Nosotros hemos tenido una experiencia puntual, que está muy bien y yo me siento felicísima de haber formado parte de ella, pero son ellos y ellas las personas que trabajan día a día para construir y hacer posible otra realidad.
P.- ¿Qué cree que le va a llamar más la atención a la gente que vea el documental?
R.- Creo que, a parte de los colores, los paisajes y la música maravillosa, es la sonrisa. A la sonrisa de la gente de Senegal me atravesó. Ver que con muchos menos recursos materiales pero con una alegría que no siempre somos capaces de encontrar en los países occidentales.
P.- ¿Le chocó algo de cómo viven allí?
R.- Curiosamente en Senegal no tuve la sensación de que nada me chocara. De hecho, más allá de la falta de algunas cuestiones y posibilidades, siempre en el plano material, era compatible con una vida que me provocaba mucha admiración, muy alejada del individualismo, con un grado de cooperación altísimo, la unión de la familia, las formas de vivir, de celebrar, el impacto de los rituales, la proximidad con la naturaleza y sus ciclos, que en occidente lo tenemos más perdido y sobre todo la alegría y la sonrisa. Sí me chocó muchísimo el día que viajamos a Mauritania. De hecho creo que no sale en el documental, pero fue la parte más dura con diferencia. Siendo frontera un país con otro son realidades antagónicas y con el tema de género, simplemente se hacía insoportable.
«Fui feliz con la música tan maravillosa que hay allí, con músicos tan excepcionales»
P.-¿Cuál fue la reacción de la gente al escucharla cantar? ¿Cómo se sintió en ese encuentro de estilos?
R.- Pues desde primera hora con Biran Wane-artista senegalés residente en Sevilla-, en España, y Mame también ideando esa letra por guaijra que luego desarrollamos durante el documental, ya sentí una conexión enorme. Pero al llegar a allí y de repente encontrarme en ese contexto y poder sentir de cerca el timbre de instrumentos con los que prácticamente antes no había estado en contacto me encantó. Tuve la suerte de poder contar con la guitarra de Canito, que íbamos juntos y él tiene un dominio enorme de los códigos flamencos y hace que me sienta muy cómoda. Me hizo de muleta. Fui feliz con la música tan maravillosa que hay allí, con músicos tan excepcionales. Todo fue como que vino dado. Fluyó con mucha facilidad, esa fue mi sensación, y espero que la gente al ver el documental y los momentos musicales también lo perciba así.
P.- Al hilo de la pregunta anterior. La música tiene un papel fundamental en la película, ¿es cómo un personaje más, el puente entre Huelva y África?
R.- Totalmente. Creo que de hecho la música es el gran personaje de la película, es la espina dorsal que atraviesa de principio a fin este proyecto y me encanta que se perciba así.
«Ha sido un regalo poder caminar con estas personas tan excepcionales en lo profesional y en lo humano»
P.- ¿Cómo ha sido trabajar con Marcos Gualda y todo el equipo? Ya tenías la experiencia de 'Coleccionismo' pero ahora ha sido más prolongado.
R.- He tenido mucha suerte porque iba con un equipazo. Primero que Canito dijera que sí cuando se lo propuse con el corazón en la mano y tuvo una actitud preciosa durante todo el viaje, más allá de lo artístico, en lo humano. Y para mí tener ese respaldo y ese apoyo artístico es algo que me hizo sentir muy cómoda durante todo el viaje. Marcos tiene una manera de dirigir genuina y maravillosa, muy humana y cercana y lo hace todo muy fácil. Javier nos ha traído el día a día de la cooperación internacional, nos ha podido contar en las profundidades cómo se desarrolla todo esto. Jesús y Caren se encargaban de la parte técnica y era maravilloso cómo lo hacían porque se nos olvidaba que nos estaban grabando. Es uno de los puntos a conseguir en un documental y no siempre es fácil. Nabil y Tania, igual que los dos Javieres, apoyando el día a día de la cooperación internacional, al igual que María José, de Fansi, Mame, Biran por supuesto, que hizo que se multiplicara la música, tanto en España como en Senengal. Seguro que me dejo muchos nombres, pero ha sido un regalo poder caminar con estas personas tan excepcionales en lo profesional y en lo humano.
