Carta al director
Las Residencias de Tiempo Libre, ¿hoteles o ayuda a los más necesitados?
Las Residencias de Tempo Libre, hasta hace unos 3 ó 4 años, han estado realizando una función social, bastante desconocida por la mayoría de los andaluces. Hasta entonces albergaban grupos de discapacitados, disminuidos psíquicos y personas mayores con pocos recursos, vecinos, la mayoría de las veces, de pequeños pueblos de nuestra Andalucía interior.
Este tipo de Instalaciones les daban la oportunidad de hospedarse en ellas durante unos días, en épocas de baja ocupación, de marzo a junio y de septiembre a noviembre, pudiendo disfrutar así de unos días de vacaciones, que si no fuera en estas condiciones, les sería imposible.
Con el pretexto de una ley de reequilibrio económico financiero impuesta por el PP que gobierna España, cerraron las instalaciones sin previo aviso el 8 de octubre de 2012. La Junta esgrimió que la medida se debía a ese plan de reequilibrio antes mencionado y que tendría un periodo de vigencia hasta el 2014.
La política de recortes hace que las residencias abran 5 meses y medio al año, y de éstos, sólo 2 y medio son los destinados a albergar a los grupos antes mencionados. Por desgracia, son muy numerosos en Andalucía. Cuentan con gran ayuda de un muy entregado voluntariado pero con nulas posibilidades económicas para ir a ningún otro lado.
Durante la temporada alta, esto es, los tres meses de verano, las residencias abren al público en general a un coste relativamente bajo . Hay que presentaruna solicitud en fecha adecuada y aportar datos de los recursos económicos de quien las solicita . Las plazas se adjudican por sorteo.
Es grato decir que en 2013 y 2014 han tenido una demanda impresionante y han podido estar casi al completo durante toda la temporada alta. Pero lo lamentable de todo esto es que La Junta no tiene ninguna intención de revertir la situación en años venideros. Ahora contempla una actualización de este plan de reequilibrio apuntando a la disminución de los periodos de estancias de los más necesitados. Eso significa que tiene la intención de mantener los centros, como meros hoteles, durante los tres meses de verano.
El cierre de instalaciones de hace 40 años durante más de seis meses, sólo está abocándolas a su deterioro y abandono empeorando la gestión que se hace de estos recursos, tanto en personal, como en medios. ¿Es ese el verdadero objetivo de la Junta? ¿Tener excusas para cerrarlas definitivamente?
El presupuesto de los andaluces no debe de estar destinado a financiar lo que serían meramente hoteles y durante tres meses al año, dando de lado a los más necesitados que, como todo el que las conoce sabe, necesitan más que nunca, en época de crisis, estas instalaciones. Colectivo de trabajadores de las Residencias de Tiempo Libre de Andalucía