CARTA AL DIRECTOR
Se están cargando el fútbol base
Desde las instituciones públicas o privadas siempre hablan o predican el ‘fair play’ en el fútbol, es decir, juego limpio, respetando las reglas, respetando a los oponentes; que en el fútbol base se eduque en el ejemplo, en el respeto, en el compañerismo, en pasarlo bien practicando un deporte.
Pero son esas instituciones las que, mediante decisiones arbitrarias, hacen que no se eduque, que no se dé ejemplo de nada, que se permita que agresiones queden impunes. No se sabe muy bien por qué, el mensaje que lanzan al niño es que puede seguir agrediendo, que aunque te sancionen por la primera agresión no pasa nada, te la perdonamos, para que puedas hacerlo de nuevo. Sin embargo, ante la misma situación a otros sí les han hecho ver que lo que hicieron en un campo de juego estuvo mal y le sancionaron para que no volviera a hacerlo. Entonces, ¿hay privilegios para algunos?
Dicen los mentideros que alcaldes y concejales, que no tendrán otra cosa que hacer, interceden ante determinadas instituciones del fútbol para que retiren sanciones o las perdonen, para que niños que han agredido a un contrario pueda jugar el siguiente partido. Yo personalmente no me lo creo: hay problemas más importantes en un pueblo o en una ciudad para que un alcalde llame a la Federación Onubense de Fútbol para que un niño no cumpla ninguno de los 5 partidos de sanción por agredir a un contrario. ¿Dónde están esos valores que predicamos tanto desde las instituciones, clubes de fútbol, como de aficionados, si después nos saltamos las normas?
Clubes que todas las semanas son sancionados por altercados, los mismos –digo que siempre los mismos–; entrenadores sancionados continuamente, los mismos digo, los mismos, y aquí no pasa nada, como diría aquel. ¿Qué está pasando en la federación?, ¿Por qué no son mas ejemplarizantes con aquellos que hacen que el fútbol base en Huelva, a veces, sea no apto para niños? Hablo de entrenadores o padres que aun estando expulsados o sancionados, se colocan dentro de los campos o detrás de las porterías para, digámoslo suavemente, mediante artimañas coloquiales, hacer que el portero contrario pueda fallar; o colocarse alrededor del campo para presionar a los árbitros. ¿Es que nadie de la federación ve esto para actuar con contundencia en el fútbol base de Huelva?
Para algunos clubes lo más importantes es ganar, sea como sea, utilizando las artimañas que hagan falta, tanto dentro como fuera del campo, incluso hablando con alcaldes y concejales para interceder ante no sé quién. Inculquemos verdaderamente esos valores que predicamos porque algunos clubes, entrenadores y padres están cargando el fútbol base de un exceso de envidia, de ambición, de solo el ganar vale. Y por todo esto, en mi humilde opinión, el fútbol formativo o de base está enfermo y seguimos sin hacer nada. Echemos del fútbol a aquellos cuyo ‘modus operandi’ sea siempre la pelea, la bulla, la presión, la violencia... Y en eso tenemos que estar todos, incluida la Federación de Fútbol de Huelva.
D.R. Huelva