CARTA AL DIRECTOR
A pie desde Tharsis a Sevilla
El decreto del día 2 de Octubre de 2018 en el que se aprueba la segregación de Tharsis del pueblo de Alosno ha sido recurrido por un grupo de vecinos de Alosno que se hacen llamar Asociación por Alosno.
Dicha asociación “constituida tan rápido” actúa desde el primer día en su pueblo contra su alcalde y concejales socialistas, puntos clave en dicha segregación, haciéndoles escraches en sus casas familiares, abucheándolos en la puerta del ayuntamiento, haciendo pintadas en la fachada del mismo, insultando en las redes al grupo y a todas las partes firmantes de la segregación, citandose todos los viernes tardes en la puerta del ayuntamiento y en el salón cultural, donde engañaban a todos lo que acudían a escuchar metiendoles mierda sobre el PSOE, y engañando en los motivos de su protesta, según ellos, basada en el mal reparto de la ya famosa deuda, presionando a la gente del pueblo para que participeN en esta protesta, exigiéndoles dinero casa por casa, puerta por puerta, señalando a quien se niega a participar de una forma u otra, boicoteando a vendedores, trabajadores, o vecinos relacionados con Tharsis.
En estos días en los que el tribunal admite su demanda sin pedir aval y paraliza como medida cautelar la creación inminente del nuevo municipio (ya iniciada el día 19 de diciembre con la creación de la gestora) con todo los daños y perjuicios que ello conlleva para el pueblo de Tharsis y a sus casi 1.900 vecinos. A mi juicio se están equivocando gravemente, están envolviendo a los habitantes de las dos poblaciones en una guerra de odios que no lleva a ninguna parte, donde nadie va a ganar y todos de una forma u otra vamos a salir perjudicados, no es la primera (espero que sí la última) en la que nos vemos enzarzados.
Si volvemos 100 años atrás, donde Tharsis contaba con 8.000 habitantes y Alosno con 1.000, ya las dos poblaciones actuaban totalmente por separado, con la “pequeña” diferencia de que el presupuesto que llegaba para el municipio se invertía íntegro en Alosno, lo que hizo que el pueblo matriz se desarrollara y creciera con los tiempos, mientras que Tharsis, que no recibía ni un duro, no contaba con agua corriente, ni cañerías, ni asfaltado de calles. Solo había mina, trabajo y unas pequeñas casitas donde duramente vivieron nuestros antepasados.Avanzados los años 70 y a través de la lucha sindical, Tharsis consigue aferrarse a la Ley del Hábitat Minero para avanzar con los tiempos en infraestructuras como lo habían hecho en Alosno.
Por dicha ley correspondía a Tharsis y solo a Tharsis, por ser donde se encuentran las minas, 100 millones de las antiguas pesetas, que gracias al alcalde de la época, un señor tharsileño…. que decide gastar el 50% de ese presupuesto en Alosno, para ganar así sus fieles seguidores acérrimos que le votarían aún a día de hoy.
La compañía, viendo como crecía el pueblo matriz y lo poco que dejaban avanzar a Tharsis, vio el cielo abierto, nunca mejor dicho, y decidió con el consentimiento del citado alcalde construir viviendas en Alosno e incentivar a sus trabajadores pagándoles un dinero y dándoles una casa gratis, para llevarse de aquí a la población e insertarla toda en Alosno. Eso no fue posible, ya que la mayoría de la población se rebeló y se negó a abandonar el pueblo, construyendo pequeñas viviendas a espaldas de la compañía y manteniéndose las familias juntas para que nadie más se fuera a Alosno.
No creo que los que reclaman igualdad y justicia ahora, conozcan bien la historia…………
Los habitantes de Tharsis, La Zarza y Corrales, pueblos que abarcaba la extinta compañía, han luchado por mantener el máximo tiempo posible en funcionamiento nuestras minas, donde también trabajaban ellos, gracias a la gran lucha sindical, la lucha de sus familias y las importantes huelgas, manifestaciones históricas en Huelva, Sevilla y Madrid, marcha pacífica a la provincia de Huelva andando 50 kilómetros en un solo día, y mil batallas más, consiguen mantener dichas minas abiertas hasta finales de los 90. ¿Dónde estaban los alosneros? ¿Dónde sus apoyos en nuestra lucha? ¿Ahora quieren nuestras minas? ¿Ahora que en el acuerdo de segregación ya su favor, consiguen que se recoja la obligación de contratar a sus habitantes, así como un reparto equitativo del beneficio, en el hipotético caso de apertura? ¿Ahora señores? ¿Ahora?
Pues como dice la canción, ahora esta tarde, y si consiguen su cometido, que es tumbar nuestro expediente de segregación íntegro, no consentiremos que nadie de Alosno trabaje en las minas, que serán explotadas por empresas privadas, pero con la deferencia de que las minas están a 100 metros de nuestras casas. ¡Son de Tharsis, señores, y nosotros somos los mineros!
Juan Caro GonzálezEx presidente del comité de empresa de la extinguida Compañía de Minas de Tharsis