SEMANA SANTA
El Jueves Santo convierte en regreso su sueño
20.55 h. Un día ideal en lo meteorológico ha sido el caldo de cultivo ideal para que el centro de Huelva sea un auténtico hervidero de cofrades, que han seguido a las hermandades de Oración en el Huerto, Buena Muerte, Misericordia y Los Judíos. Juntas han recuperado el Jueves Santo.

Otro día santo que se ha alejado de las garras de la pandemia y la lluvia. El Jueves Santo también se ha reconquistado. Un día inmaculado de sol y despejado de nubes ha sido la invitación ideal a los cofrades de Huelva para recuperar la estampa de otro día señalado en la Semana Santa de Huelva a través del buen hacer de las cofradías de Oración en el Huerto, Buena Muerte, Misericordia y Los Judíos, que soñaban con este regreso.

Sobre las 19.05 horas la Hermandad de la Oración en el Huerto encontraba a las puertas de la Purísima Concepción una multitud dispuesta a contemplar y abrir miradas y corazones hacia los pasos de sus sagrados titulares. Primero cruzó las puertas Nuestro Padre Jesús de la Oración en el Huerto, talla que cumple 45 años desde que saliera de las manos de Luis Ortega, y que estuvo acompañada por la Banda del Santísimo Cristo de los Remedios (Sevilla).
A continuación, con sus característicos adornos florales y la joya de su manto de forma cónica en sus jarras, procesionó entre los sones de la Banda del Liceo Municipal de la Música de Moguer Nuestra Madre y Señora de los Dolores, la obra de Luis Álvarez Duarte que alcanza en 2022 55 años.

También en el corazón del centro, dos calles más arriba, se hizo cofradía la Hermandad de la Buena Muerte sobre las 19.20 horas en torno a la Iglesia de Santa María de Gracia. En este 2022 se cumplen 100 años de la primera estación de penitencia, que data de 1922.
La Banda de Cornetas y Tambores Santísimo Cristo de la Expiración ‘Salud y Esperanza’ marcó el paso del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y a su estela se meció el paso de Nuestra Madre y Señora de Consolación y Correa en sus Dolores, con el impulso musical de la Banda Municipal de Villalba del Alcor.

La Hermandad de la Misericordia partió otro ratito más tarde, igualmente en la zona centro, para poner el contrapunto a la jornada. Con el único sonido de las campanas de la capilla de la hermandad y la esquila del muñidor en la apertura, puso su patrimonio en la calle la impresionante talla del Santísimo Cristo de la Misericordia, talla de Gabriel Cuadrado (1983).

El cierre tradicional de la jornada, desde las 20.30 horas, corrió a cargo de la Hermandad de los Judíos, que desplegó tres pasos sobre las inmediaciones de la Catedral de la Merced. Poco a poco fueron encontrándose con sus fieles el Nuestro Padre Jesús de las Cadenas, el Santísimo Cristo de Jerusalén y Buen Viaje y el paso de María Santísima de los Dolores, que por primera vez procesionó bajo palio y una ráfaga de ocho. El respectivo acompañamiento musical lo pusieron la Banda de Cornetas y Tambores Santísimo Cristo de la Victoria (León), la Banda de Cornetas y Tambores Nuestro Padre Jesús del Gran Poder (Sevilla) y la Banda Municipal Nuestra Señora del Rosario (Sevilla).
