ATLETISMO

Laura García-Caro experimenta un tortuoso sueño olímpico en Tokio

11.09 h. La atleta lepera no pudo tener el debut olímpico soñado en los Juegos Olímpicos de Tokio y cruzó la línea de meta en el puesto trigésimo cuarto en el circuito de Sapporo, donde tuvo una sufrida prueba de 20 kilómetros marcha. Con un intenso calor y alta humedad no tuvo buenas sensaciones y tras perder contacto con el grupo de cabeza encadenó en torno al kilómetro 10 tres sanciones y tuvo que estar dos minutos parada como sanción. Al regresar a la prueba sólo le quedó luchar como sabe. 

Laura García-Caro experimenta un tortuoso sueño olímpico en Tokio

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Laura García-Caro experimenta un tortuoso sueño olímpico en Tokio

Los sueños están para cumplirse y vivirlos y Laura García-Caro había luchado todo lo posible y más para estar en los Juegos Olímpicos de Tokio. Sin embargo, tras lograrlo, vivirlo no ha tenido el sabor que esperaba la atleta lepera, que experimentó una prueba sufrida en Sapporo. El calor, la humedad y sobre todo la sanción la sacó de la lucha por los primeros puestos. Esos dos minutos parada arruinaron su carrera y sólo le quedó luchar hasta el final para ser trigésimo cuarta, a más de ocho minutos del oro, siendo la tercera española. Demostró, como viene haciendo estos años, su capacidad de sufrimiento y trabajo para seguir remando hasta la meta con dignidad y como ejemplo de fortaleza mental pese a tener mucho en contra. 

Laura García-Caro experimenta un tortuoso sueño olímpico en Tokio

García-Caro comenzó la prueba rezagada con respecto al grupo principal, que comandaba con las chinas Shijie Quieyang, Jiayu Yang y Hong Liu la italiana Palmisano, ganadora de la Copa de Europa en la que fue bronce la atleta lepera. Ahí marchaban unas 25 atletas con un ritmo en torno a 4:35 el kilómetro, con el que la representante onubense perdía unos pocos segundos que poco a poco fue limando para incorporarse a la parte de atrás de ese grupo. Sus compañeras María Pérez y Raquel González Campos iban en el interior del grupo bien colocadas. 

Pasado el octavo kilómetro la ucraniana Hanna Shevchuk protagonizó un cambio que, aunque no le sirvió para escaparse, sí logró que el grupo se enfilase y perdiera unidades. García-Caro estaba nuevamente desconectada de las mejores en unas condiciones de mucho calor, con una sensación térmica de 37 grados, y además recibía la primera advertencia.  

Alcanzado el ecuador de la prueba, García-Caro marchaba entre las veinte primeras, viendo el grupo a nueve segundos, que pasó el kilómetro 10 en 45:57. Además vio su segunda advertencia, un obstáculo añadido para tratar de reconectar de nuevo con las mejores. Allí Raquel González Campos había perdido ligeramente comba, mientras que María Pérez cada vez estaba más visible en la primera línea.

Poco después la atleta de Lepe vio la tercera y se tuvo que quedar dos minutos parada como sanción en el pit lane. Sus pequeñas esperanzas de estar luchando por las medallas se esfumaron definitivamente. Ya su carrera era otra y tenía que regresar a un marchar más ortodoxo para no llevarse la sanción descalificatoria por parte de los jueces. 

Laura García-Caro experimenta un tortuoso sueño olímpico en Tokio

Más adelante, en el kilómetro 12, marchaba en el puesto 35 a 2:35 de la cabeza, donde su compañera María Pérez, vigente campeona europea, era la única española que aguantaba en un grupo de diez atletas, con Palmisano y las chinas marcando el ritmo. A ocho segundos en el kilómetro 13 estaba a ocho segundos Raquel González Campos y a doce en el 14. 

 En el kilómetro 14 García-Caro ocupaba el trigésimo tercer puesto con 1:07:18, a 3:14 de las primeras, donde un primer cambio brusco redujo a seis las aspirantes a las medallas. Ahí estaba María Pérez, la italiana Antonella Palmisano, la brasileña Erica de Sena, la colombiana Arenas, las chinas Liu y Yang. Muy cerca estaba la australiana Montag. Poco después hubo un nuevo incremento del ritmo y se pasó a 4:16 el último kilómetro, que causó que la granadina estuviera a cuatro segundos de los mejores, quinta, con Palmisano muy fuerte, con la china Yang a su estela. 

Laura García-Caro experimenta un tortuoso sueño olímpico en Tokio

En los últimos kilómetros se fue sola Palmisano con autoridad. Segunda también con holgura era segunda Arenas y tercera iba De Sena, que fue sancionada cuando se acercaba a la segunda plaza, abriendo la lucha por el bronce a María Pérez con la china Lui en el último kilómetro. 

Con un 4:06 en el último kilómetro se impuso Palmisano con 1:29:12 en línea de meta. Arenas llegó a 25 segundos y en el sprint final por el bronce Luis se llevó el metal a 45 segundos y María Pérez entró a 53 segundos en cuarta posición. La tercera medalla de chocolate para los españoles en la marcha. Decimocuarta a 2:45 fue Raquel González Campos. Trigésimo cuarta fue finalmente Laura García-Caro, a 8:36 de la ganadora. Ya puede decir que es olímpica y seguro que no será la única vez. 

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