Nino, buen producto en Mazagón
Nino, buen producto en Mazagón
Taberna Nino
Se hace llamar Mesón, Restaurante, Bar y Taberna. Es Nino. Estamos en Mazagón , en el núcleo de Fuentepiñas, coloquialmente conocida por la “calle del Choco” No se ve el mar directamente, pero sin lugar a duda estamos en un lugar playero. Y Nino reúne un poco de todo ello: es mesón, restaurante, tiene una barra, y un poco de taberna de pueblo. Y sobre todo sabe aprovechar la cercanía del Atlántico y de los puertos de Huelva para ofrecer buen producto .
¿Quién dijo que el producto era aburrido? Pues eso, que solo en base a no maltratar el producto que se puede adquirir en esta provincia con garantía de calidad, ya podemos ofrecer al cliente un producto con el que salga satisfecho.
En Nino (póngase el apellido que se quiera, restaurante, mesón, taberna…) no podemos ir a buscar creatividad, alta cocina o platos originales . En esta taberna de Mazagón disfrutaremos con los pescados y mariscos de la zona , las carnes ibéricas, buey o el cordero, y algún que otro guiso o cocinado, bien sea en forma de arroces o de revueltos, además de los consabidos entrantes y tapas frías al uso.
Las raciones son generosas y algunos platos tienen un punto de originalidad como la brocheta de carne que se sirve de forma vistosa y apetitosa. Tiene una amplia terraza en la zona peatonal del núcleo Fuentepiña, y dentro, además de una barra que recuerda ese carácter de taberna, hay otros salones.
Empezamos la prueba del producto con unas gambas blancas cocidas de tamaño más que XL, que no defraudaron, y de precio razonable tratándose del producto citado. Seguimos con otro clásico, la ensaladilla de gambas , que igual que lo anterior, por su sencillez y calidad nos aportó ese punto de deleite que produce la sensación de haber acertado en la elección. Bien cocida la patata, buenas gambas y en abundancia, y mayonesa la justa. ¡Sencillo y rico!
Otra prueba del algodón son las coquinas . Nada que objetar. Coquinas de tamaño mediano, sin arena; sin mucho vino, ni ajo ni aceite, que adultere el sabor; con su tiempo justo de pasado en la sartén, y sobre todo hechas al tiempo, ni refritas ni pasadas… Para disfrutar.
Todo fresco
Y acabamos con un pescado. En Nino el producto marítimo se sirve al gusto del cliente: frito, al horno, a la sal… Previamente pasó el responsable de sala con una bandeja ofreciendo los pescados y mariscos del día . Todos frescos, y de captura salvaje. “En esta Casa –nos explicó– no entra nada de piscifactoría”. En el interior tienen un acuario donde esperan su turno alguna que otra langosta y bogavante… Y optamos por una dorada a la espalda , que llegó a la mesa servida por raciones y en su punto de plancha. De acompañamiento berenjenas y calabacines también a la plancha.
Para rematar, uno de los postres estrellas de Huelva: el helado de turrón al Luis Felipe, es decir con un toque de brandy y servido en una tulipa o barquillo de canela redondo.
