Bar La Peña
Un clásico de Puebla de Guzmán inaugurado por Diego, ‘El Charratelo’ en 1952: Bar La Peña . «Mi padre, Diego, tuvo ocho hijos y para tirar del carro puso este negocio en el que empezó a poner tapas de caldereta, el revoltillo guisado, riñones al Jerez…» expone Manuel Jesús, el actual propietario, a GURMÉ Huelva.
Manuel Jesús tomó las riendas de Bar La Peña en el año 92, y siguió la estela que marcó su progenitor. Mucha cuchara en invierno, patatas aliñadas, picadillos, y pescado frito en verano y, en definitiva, «tapas tradicionales de toda la vida en este pueblo», apunta.
Pero hay tapas que no se encuentran por la zona, y quien las busca, sabe que debe acercarse a las puertas de La Peña. Es el caso de la oreja, el morro , los ya mencionados revoltillos, la lengua estofada o la costilla en salsa . Un bar que encanta a los enamorados de la casquería.
Entonces, ¿cuáles son las tapas imprescindibles de esta casa? «Lo que más vendo es el revoltillo, la carrillada de cerdo en caldereta, el montadito de lomo asado ibérico con cebolla caramelizada y tomate natural y la patata aliñada », selecciona Manuel Jesús. Para acompañar, Cruzcampo bien fría o algún vino -conviene dejarse asesorar por el dueño-.
El local es pequeño, con capacidad para unas 40 personas entre las mesas y la barra.