Kalaka, gastrobar con sabor choquero
El “problema” de Kalaka es qué elegir. A su amplia carta, que, como dicen ellos es “ un amplio abanico de sabores para su paladar ”, se une un “fuera de carta” en forma de pizarra negra donde diariamente apuntan casi otros veinte platos a añadir a los que ya están en carta. Un reclamo, ciertamente, para acudir una y otra vez a este establecimiento… si el resultado final es bueno…
Y a ello nos pusimos, a catar algunas de las propuestas, que van desde los clásicos jamón de bellota y la gamba de Huelva a la cocina de fusión.
Antes, anotar que la mayoría de las propuestas gastronómicas de Kalaka se ofrecen en ración y en tapas, con unos emplatados muy vistosos . Subrayamos también, en plan muy positivo, la amplia oferta de vinos de casi cuarenta denominaciones de origen de España.
¡Al plato! Empezamos con un canelón de aguacate relleno de pollo con salsa loncha y frutos secos, con mahonesa de chile. Un plato fresco, muy sabroso, aunque encontramos el pollo un poco pasado.
Después nos sirvieron una ensaladilla de merluza y gambas . El pescado blanco estaba deshilachado, formando una pasta con unas gambas, quizás más cocidas de lo deseable, y con sucedáneo de caviar. Un plato también muy sabroso, ligero y fresco.
Pero quizás la propuesta que más nos gustó , y para apuntar como una de las tapas del año, fue la piruleta de langostinos sobre alioli de mango. Muy bueno. Buena pieza de langostino y muy apetecible el alioli.
El canelón de choco con queso en salsa negra, que siguió,es una propuesta original. Pero se nos antojó un poco falto de cremosidad, aunque muy bien conseguido de sabor.
Y acabamos con un lingote de queso con frutos rojos y helado . Muy aceptable.
Como decíamos, buena propuesta para los que le guste la oferta gastrobar . Y de precio más que recomendable.