Copeiro y Nielsen firman un libro revelador sobre él

La vida de película de Adolfo Clauss

Es un personaje clave en la historia de WIlliam Martin y la operación 'Carne Picada', pero también alguien que vivió muchas vidas, que se mostró activo, políglota y polifacético, un superviviente a tres guerras sobre el que han investigado Jesús Copeiro y Enrique Nielsen para mostrar todas las etapas de una vida de película en su libro 'Clauss'.

La vida de película de Adolfo Clauss

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La historia de los lugares se cuenta a través de las vidas de sus habitantes. La rutina la marcan los hechos comunes que cada día hace una mayoría, pero definen los acontecimientos, las acciones distintas y especiales. En Huelva nació el 7 de febrero de 1897 Adolfo Guillermo Clauss Kindt, un hombre con mil facetas que vivió una vida de película, que recorrió mundo, sobrevivió a tres guerras, que fue agente alemán, falangista y acabó trabajando para Estados Unidos. Era políglota, vivió aventuras en África, fue preso en Huelva, trabajó en Doñana… Como si todo esto fuera poco fue un personaje clave en el misterioso caso de William Martin.

La vida de película de Adolfo Clauss

Más de 50 años después de su muerte, Clauss, que no era dado a entablar amistades, sin saberlo, tiene dos grandes amigos que le conocen mejor que nadie: Jesús Copeiro y Enrique Nielsen. Ambos han arrojado luz sobre las aristas de su trayectoria vital, desmontados mitos y leyendas como que era alguien cercano al entorno de Hitler, por ejemplo. Han ahondado en su infancia, en su educación, en su ámbito familiar, le han seguido la pista con la misma minuciosidad con la que el afrontaba sus misiones. Ellos sostienen, en base al testimonio de su hijo, que fue Clauss quien orquestó el robo del cuerpo de William Martin y organizó su traslado en un submarino para que los alemanes le practicarán una segunda autopsia que ratificara que era quien parecía ser. Así comprobaron la útil información a sus ojos que los británicos acompañaron al cuerpo en la Operación Carne Picada era fidedigna, aunque resultara ser un engaño.

Enrique Nielsen explicó a huelva24.com que el libro sobre Clauss es respuesta a la amplia demanda por parte de sus lectores tras escribir sobre William Martin y las guerras mundiales en Huelva. Reconoció que “le hemos tenido mucho respecto porque es figura complicada de abordar”, pero una vez que lograron suficiente información decidieron afrontar el reto. “Desde su nacimiento a fallecimiento creemos que hemos cubierto todas sus etapas. Conocíamos cosas y hemos descubierto facetas nuevas en el ámbito más familiar gracias a los testimonios familiares, que han sido fundamentales. El de su hijo Federico Clauss, que aún vive, no está pagado.

Nielsen opinó que lo más puede sorprender a lector de ‘Clauss’ es sobre todo su parte más familiar. Hay un aspecto que ha sorprendido mucho y es su infancia atípica. Nació en Huelva y tenía nacionalidad  alemana y con 5 años su padres deciden trasladarlo a un internado en Alemania. “Eso influyó en su personalidad. No dejó de llorar durante años, pero también recibió su educación con una buena metodología”, aseguró.

También recordó la significativa frase que el protagonista de la obra pronunció y que abre las páginas del libro. Yo he estado en tres guerras y procuraré por todos los medios que mis hijos no vayan a ninguna”. Tomó parte en la Primera y Segunda Guerra Mundial y también en la Guerra Civil Española. “Tomó conciencia de que tantas guerras no compensan y que no quiere se ambiente para nadie”, señaló Nielsen.

La vida de película de Adolfo Clauss

Acerca de si era espía, el coautor de la obra comentó que ese término tiene “connotaciones negativas” y prefirió decir que era “miembro de la inteligencia militar, un patriota que quería beneficiar a su nación y estaba dispuesto a actuar para favorecerla, como hacían otros miembros de la comunidad alemana y británica”. Apuntó que una vez terminada la Segunda Guerra Mundial tanto su padre, como su hermano Luis, que colaboró con Adolfo en alguna misión, estaban en el listado elaborado por los Aliados para ser repatriados.

Nielsen y Copeiro desvinculan tajantemente a Clauss del nazismo en base a las fuentes escritas y orales consultadas. “Un señor en Facebook hablaba de la naturaleza nazi de los Clauss y que estaban cerca del entorno de Hitler y para nada. Pertenecía al Abwehr, el sistema inteligencia alemán militar y su jefe era Wilhelm Canaris, contrario a las ideas de Hitler. Intentó atentar contra él en varias ocasiones y formó parte de la Operación Valkiria. Este sistema desapareció y se quedó sólo las SS y él fue ahorcado. Eran más patriota que nazi. Es una barbaridad decir que los Class eran una familia que pertenecía al entorno de Hitler”, aseveró el autor onubense.

Lógicamente uno de los capítulos está dedicado a William Martin y recordó que su hijo Federico les contó que ambos fueron a ver la película ‘El hombre que nunca existió’ y al salir del cine le reconoció que la historia no fue así, que era “propaganda británica” y que los alemanes se llevaron el cuerpo, por lo que la tumba del cementerio de Huelva está vacía. “Él al fin y al cabo trasladó a su hijos muchas batallitas y nos contó eso y también su sobrino. Les contó cómo funcionaba sabotaje y seguramente sabía más cosas. La mala suerte es que falleció con 65 años. Pero el legado que dejó a su hijo Federico nos sirvió para defender nuestra tesis”.

La vida de película de Adolfo Clauss

“Este libro lo disfrutará más quien no haya leído los anteriores libros nuestros”, consideró Nielsen, que recordó que Clauss realizó su primera misión secreta con  años en la Primera Guerra Mundial. En la Guerra Civil fue capitán de la Legión Cóndor en España, conflicto que provocó que estuviera dos años sin ver a su mujer y sus dos hijos, que estaban en territorio del bando republicano.

“Todo lo que rodea a Claus tiene tintes de aventura y su vida es muy cinéfila. No para y está continuamente moviéndose. Él manifiesta que no podría realizar un trabajo en una oficina, ya que su carácter era más nómada e indómito“, explicó Nielsen, que ejemplificó su condición de “personaje dinámico y con muchos giros“ cuando tras la Primera Guerra Mundial GM se fue a África, trabaja en Doñanay  conoce a su mujer, que era de Sevilla, y se metió en la Falange. “Hay material como para que alguien se fije en esta historia y haga una película“, agregó.

Copeiro y Nielsen también colaboraron con María Clauss en su exposición ‘¿Era mi abuelo un espía?’, dedicada a Luis Clauss, que “era una figura fundamental“. Resulta curioso, que “no hay documentación militar de Luis y Adolfo, cuando ambos participaron en las dos guerras mundiales. Es raro que no exista y podría obedecer a que esté clasificada por algún motivo“, opinó sobre el vació sobre su figura en archivos alemanes, españoles y británicos. Expuso que los británicos tenia seguidos a todos los espías alemanes y que es “extraño“.

Nielsen quiso agradecer “el apoyo desde el minuto 1”a Rafa Pérez, responsable de la Editorial Niebla, que hace “un gran fomento de la cultura onubense“. Mostró también su satisfacción porque el libro se está vendiendo muy bien. “Estamos contentos. No ganamos nada, pero no lo hacemos por dinero sino por descubrir tesoros de la historia de Huelva, ponerlos en valor y trasladárselos a la gente“.

La vida de película de Adolfo Clauss

Incidió en la importancia de valorar nuestra historia y divulgarla, algo que también puede ser fuente de riqueza. Es por ello que señaló que esta situación es de “las asignaturas pendientes“ de Huelva y que como en otros lares hay turismo bélico, perfectamente podría haber una ruta turística sobre William Martin.

Al respecto expuso que “atraería a mucha gente y rompería con la estacionalidad del turismo. La ruta empezaría en la playa de La Bota, donde debería haber un monolito o una placa o algo que identifique el lugar donde se encontró el cadáver. Se sabe que el cuerpo fue llevado en burro al Muelle de las Canoas y que de Punta Umbría fue a Huelva y se le dio un responsó en la iglesia de la Concepción. Se trasladó a la sala de autopsias del cementerio y el último lugar para visitar sería la tumba“.

No obstante, Nielsen no quiso ser pesimista y valoró todos los actos realizados con motivos del 75 aniversario de la aparación del cuerpo y el hecho de que el Ayuntamiento de Huelva realizara un reconocimiento oficial a la figura de William Martin. Un buen punto de partida para una historia de la que aún queda mucho por contar.

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